Este lunes se tiene previsto una reunión muy importante entre la Presidente de la Comisión Nacional de Juegos de Azar (Conajzar), los quinieleros y la Senadora Esperanza Martínez que mediara sobre la problemática de uno de los grupos que más ha sufrido durante los últimos tiempos son los trabajadores de los juegos de azar, por una falta total de control y sanción que en muchos casos, siendo comprobadas las denuncias, terminan en la nada por la complicidad de las autoridades y empresarios adjudicados que de apoco se les va descubriendo sus maniobras.
A modo de conocer algunas de esas arbitrariedades por ejemplo citamos que, en el año 1995, con la Quiniela Nacional, el porcentaje de ganancia del trabajador de la quiniela fue del 17%. Al año próximo aumentó al 20%. Al comenzar la empresa MONSOL, año 1999, querían bajar esta ganancia al 15%, y gracias a la unión lograron que no bajarán el porcentaje.
En el año 2004 se formó Sindicato Nacional de Trabajadores, Vendedores de Quiniela, Bingos, Juegos de Azar y Afines (SINTRAQUIBA) y empezaron a reclamar el aumento. En el año 2005 con la empresa REPSUR se siguió con el 20% de ganancia, año en que se dieron cuenta que el costo de vida era muy caro y que necesitaban un ajuste en la ganancia, cosa que no lograron, a pesar de la lucha y reclamos constantes.
A partir de enero del año 2010, con la empresa MEPSHOW, lograron el anhelado aumento al 25%, momento donde empezó también la persecución sindical por no estar de acuerdo en la utilización de la Máquina Pos.
Del mismo modo en aquel entonces presentaron las denuncias por el no pago del canon mensual al Estado, que en principio la empresa ofreció el pago mensual de G. 7.560.000.000 (siete mil quinientos sesenta millones), hecho que solo cumplieron por un par de meses, y tras 6 meses de no pagar el canon consiguieron que les bajaran a G. 6.100.000.000 (seis mil cien millones).
La empresa MEPSHOW hasta la fecha tiene deudas con el Estado. Los problemas con la empresa del ex presidente Juan Carlos Wasmosy se iniciaron tras la implementación de las máquinas pos en reemplazo de los tradicionales talonarios, ya que empezaron a cobrar a los trabajadores la suma de G. 56.000 mensuales por la utilización de pos y G. 1500 por cada rollo de papel utilizado para la impresión de las boletas de las apuestas realizadas.
Así también obligaron a los trabajadores a firmar un pagaré de 1.500.000 gs., como una garantía en caso de robo o extravío. En los casos de robo que hubo los trabajadores tuvieron que efectivizar los 1.500.000 gs., y para volver a trabajar debieron abonar además G. 500.000 más para poder solicitar otro pos, llegando así a la suma de G. 2.000.000 que tuvieron que pagar los compañeros, para volver a trabajar.
Esta persecución sindical, debido a todas las denuncias realizadas, culminó con la expulsión de todos los dirigentes del sindicato a partir del mes de mayo del año 2010. En el año 2015 la empresa TDP, de la familia Wasmosy, que hasta la fecha sigue siendo la encargada de la explotación de la quiniela y mantuvo la ganancia del 25%, que figura en el contrato firmado por las partes.
Todas estas denuncias fueron presentadas por el Sintraquiba ante la Comisión Nacional de Juegos de Azar (CONAJZAR), no teniendo respuesta favorable. Es importante mencionar que existen copias, en el archivo del Sintraquiba, de todas las innumerables denuncias realizadas y presentadas.
En el año 2020 la CONAJZAR, a través de una resolución, resuelve dar una prórroga de 6 meses más para que la empresa TDP siga explotando la quiniela. Con la llegada del Covid-19, se suspendieron los sorteos a partir del mes de marzo de 2020, volviendo a iniciarse los sorteos a partir del mes de mayo.
Utilizando la excusa de la pandemia, la empresa TDP decide unilateralmente bajar el porcentaje de ganancia al 20% y además, deciden también dejar de lado a las personas mayores de 60 años tiradas a su suerte, sin ninguna ayuda, lo que motivó a iniciar nuevamente la lucha por recuperar el despojo que sufrieron los trabajadores y trabajadoras.
Ante estos hechos se iniciaron manifestaciones, paros, denuncias ante la fiscalía, Conajzar, Ministerio del Trabajo, Cámara de Senadores, la Prensa, etc, lo que motivó a que la empresa TDP cese a varios corredores e iniciara nuevamente la persecución sindical con los miembros del Sintraquiba.
A pesar de todas las denuncias, los incumplimiento que tienen con el Estado: no cumplieron con la ley 431/73 del pago a los ex combatientes, ni el artículo 19 de la ley 1016/97 de los premios no retirados; mucho menos con sus trabajadores que ni siquiera reconocen la relación de dependencia, obligándolos a renunciar a todos sus derechos laborales y humanos, en el mes de septiembre la Conajzar adjudicó nuevamente la explotación de la quiniela a la empresa TDP de la familia Wasmosy. Luego de varias presiones y amenazas de denunciar al Estado por la pérdida de 800 millones de guaraníes por día, por parte de la empresa TDP, el 4 diciembre del año 2020, el Presidente de la República rubricó la adjudicación realizada por la Conajzar a favor de TDP, a través del decreto No 4452, a pesar de las múltiples irregularidades denunciadas por diferentes organizaciones y el Sindicato.
Los sorteos iniciaron el 19 de diciembre del año 2020. El canon ofrecido al Estado es del 19,60% mensuales sobre la recaudación bruta, o 7.500 millones como mínimo garantizado y el porcentaje a los trabajadores vendedores el 20,050%, obligándolos a firmar un contrato leonino de prestadores de servicio, sin reconocer como siempre la relación de dependencia que tienen con los sufridos trabajadores, aparte les hacen firmar pagarés en blanco de G. 1.200.000 como garantía por las máquinas obsoletas y delegan sus responsabilidades a los agencieros.
No son ellos los que ganaron la explotación en exclusividad de la modalidad quiniela, y no permitiendo integrar a muchos compañeros y compañeras a sus trabajos en persecución sindical, por las denuncias y manifestaciones realizadas defendiendo sus derechos que son irrenunciables.
Luego de la adjudicación, la empresa TDP no autorizó a que los adultos mayores puedan volver al trabajo, por supuestamente protegerlos a que no se contagien del Covid-19, a pesar de que hay varios protocolos que se puede seguir para evitar el contagio.
Entonces ¿Quién se hace responsable de la alimentación de estos compatriotas, de la salud, alimentación, vestimenta? porque jamás tuvieron IPS, vacaciones, aguinaldo, ninguna prestación, mucho menos seguridad social.
Otra interrogante es ¿Cuál es la forma en que la Conajzar controla la recaudación diaria de la quiniela y los sorteos? El día de hoy, la Senadora Esperanza Martínez recibirá en audiencia a miembros del sindicato y a la titular de Conajzar para interiorizarse de todos los problemas que existen en este ámbito y ayudar a acelerar los procesos de investigación sobre adjudicaciones privilegiadas y atropellos cometidos con los trabajadores de estas empresas.
