jueves, octubre 3, 2024
22.7 C
Asunción
InicioEditorialMensaje político en clave electoral

Mensaje político en clave electoral

Categoría

Fecha

La visita del ministro argentino de Economía sirvió sólo para dejar una espesa cortina de humo

La fugaz presencia del ministro de Economía argentino en Asunción tuvo una serie de repercusiones que deben ser leídas en clave electoral. Dijo, por ejemplo, que existe una deuda histórica con el Paraguay por intercambio de energía de Yacyretá que será cancelada en los próximos cuatro meses. Para entonces ya se habrán celebrado las elecciones y habrá cambio de guardia en la Casa Rosada. Puede incluso que el propio Sergio Masa sea el nuevo Presidente argentino, ya que corre como candidato del peronismo duro liderado por Cristina Kirchner, la actual vicepresidenta. Hasta entonces, la gran batalla del oficialismo es generar fondos con los cuales apalancar la fantástica marea de billetes de banco que inunda el país vecino y que sostiene el universo de planes sociales en que se asienta la “fidelidad” del voto kirchnerista. Esta, y no otra, es la tarea que compete al Ministro de Economía argentino: llenar las cajas fiscales, “hacer cash” para que no falte el lubricante electoral. Lo demás, incluido el malhadado peaje fluvial, puede esperar porque por el momento rinde “buena platita”.

Una consultora internacional (The 1841 Foundation) catalogó a Argentina como el tercer infierno fiscal del mundo, sólo superado por Venezuela y Bielorusia. Los argentinos son asaltados cada año por una procesión de depredadores formada por los sistemas tributarios federal, provincial y municipal con una lista de 148 diferentes impuestos. Aún así, la orgía de gasto público enfocado en asegurar el voto es insaciable y acaban de agregar tres impuestos nuevos a la ya superpoblada cartilla de gabelas y contribuciones varias.

En esta apoteosis fiscal, es imaginable que el peaje a los trenes de barcazas que canalizan el 80% del comercio exterior paraguayo siga vigente y lo seguirá hasta bien entrado 2024. La misión del ministro argentino es fondear como sea un Banco Central exangüe, casi anémico. Primero hay que ganar las elecciones y luego atender los reclamos del país “hermano”. Esta urgencia angustiosa por salvar las papas en octubre próximo hace que el Gobierno argentino pase por encima de compromisos internacionales como el Acuerdo de Transporte Fluvial por la Hidrovía Paraguay-Paraná que determina que el cobro de impuesto, gravamen, tributo o derecho sobre el transporte basado únicamente en el hecho de la navegación no se puede ejecutar sin previo acuerdo de los países signatarios. Argentina violó groseramente este precepto y, por si faltara algo, procedió a la facturación extorsiva del peaje secuestrando durante horas a barcos paraguayos al mejor estilo filibustero.

La visita del ministro argentino de Economía sirvió sólo para dejar una espesa cortina de humo lo suficientemente densa como para garantizarle un escape exitoso.

En Buenos Aires lo estaba esperando la verdadera batalla.

 

Equipo Periodistico
Equipo Periodistico
Equipo de Periodistas del Diario El Independiente. Expertos en Historias urbanas. Yeruti Salcedo, John Walter Ferrari, Víctor Ortiz.