Como una alternativa para la penetración típica, llega el fisting, una práctica que promete una oleada de placer, por medio de la fuerza del puño y las manos que te llevarán a un orgasmo diferenciado, si se realiza con los debidos cuidados.
“Dame mucho más”, te susurra mientras le vas masturbando rítmicamente con dos dedos y entre toda esa mezcla de placer y el pedido de urgencia de tu pareja por sentir un poco más, se presenta una fantasía: “¿y si te meto la mano?”.
A esta práctica se la conoce como “fisting” y consiste en introducir la mano en la vagina o el ano de tu pareja, con el objetivo de realizar una penetración a mayor profundidad y con una connotación más dura. Teniendo en cuenta un artículo publicado en Infobae, esta actividad surge como una variante al sadomasoquismo, buscando un encuentro sexual con sensaciones más elevadas.
Según la Consejería Sexológica de Paraguay, el fisting puede llegar a considerarse como una práctica sexual extrema, pero si se realiza de forma sana, puede resultar muy excitante; de lo contrario, conlleva graves lesiones.
Por eso, desde la institución consideran que resulta esencial el entrenamiento y la gradualidad a la hora de practicar y recibir. Igualmente, afirman que, pese a ser una práctica que conlleva riesgos, las personas que experimentan el fisting lo describen como placentero y excitante.
FISTING PASO A PASO
De acuerdo al blog de psicología y sexología Divanate, antes de comenzar resulta necesario ir dilatando poco a poco la zona, sea anal o vaginal, para penetrar el puño entero. Así también mencionan que la vagina es mucho más elástica que el ano, por lo tanto resulta más fácil poner en práctica esta técnica. El ano, no se dilata tanto y puede ser más doloroso, con una mayor probabilidad de dañar los tejidos.
Así, el sitio web facilita 4 tips básicos que pueden servir para quienes deseen adentrarse en este mundo que combina el placer, la dureza y el ligero dolor para dar paso a diferentes oleadas de orgasmos:
1- La zona tiene que estar bien limpia, es importante la higiene. En este aspecto, se trataría de las mismas prevenciones practicadas si se desea llevar a cabo una penetración anal con el pene.
2- La persona que estará recibiendo esta penetración debe estar con un alto nivel de excitación para que sea más fácil la introducción de la mano o puño y así también resulte más placentera para la misma.
3- Usar mucho lubricante será clave al momento de experimentar con esta práctica, ya que así se ayuda a una penetración más rítmica y excitante. Para ello, se recomienda el lubricante soluble en agua.
4- Dilatar la zona de forma gradual. Primero se puede masturbar a la pareja iniciando con dos dedos, después tres, posteriormente se intenta con cuatro y así poco a poco, se avanza paulatinamente a la introducción de la mano entera. Todo esto de manera suave, sin ningún tipo de brusquedad.
5- Durante la introducción de la mano y la estimulación rítmica, se debe rotar la mano para una mejor penetración, buscando alcanzar un placer a profundidad, así como también diferentes movimientos para brindar una sensación completamente diferente.
(Maneras de poner tu mano para introducir en la cavidad anal o vaginal)
CUIDADOS A TENER EN CUENTA
Teniendo en cuenta las declaraciones para Infobae de Walter Ghedin, médico psiquiatra y sexólogo, el fisting una técnica que requiere cuidados especiales y una alternativa de riesgo por la dilatación extrema de los tejidos vaginales o anales.
En este sentido, el blog de Divanate también destacó que la dilatación completa no es algo muy fácil de lograr, puesto que una expansión extrema del ano o de la vagina puede causar daños en los tejidos.
Por su parte, Monica Branni y Maria Hernando, psicólogas y sexólogas de Platanomelón, una sexshop online, aconsejan no improvisar el fisting durante el encuentro erótico.
Para el fisting anal, ambas recomiendan que la persona se ponga en 4 para permitir mayor flexibilización de los músculos, mientras que para el fisting vaginal se considera esencial colocarse boca arriba para un mejor acceso al punto G y más relajación.
“Planificar la experiencia, hablándolo previamente con la pareja sexual, es esencial para pasarlo en grande y establecer un clima cómodo y de confianza”, aseguran las profesionales.
Recomendaciones claves del experto Ghedin:
– Nunca llevar a cabo la práctica desde el comienzo, sin ningún tipo de previa, juego o altas dosis de excitación. Debe realizarse cuando ya los cuerpos estén preparados y con una gran carga de placer.
– Nunca realizarlo en forma violenta.
– Si la persona siente dolor o siente que no es placentero hacerlo, lo recomendable es cambiar a otra variante sexual.
– Los movimientos lentos y de rotación ayudan a la penetración y una mayor estimulación.
– Si hay coito posterior, el uso del preservativo es regla por la congestión de la mucosa, lo cual lleva a microhemorragias que aumentan las probabilidades de contagio de enfermedades de transmisión sexual.