Teniendo en cuenta una publicación realizada en Instagram por la sexóloga argentina, Cecilia Ce, los orgasmos no siempre pueden desarrollarse en contextos eróticos ni con la estimulación de genitales. Igualmente, resaltó que este tipo de llegada al clímax de manera inesperada puede desarrollarse tanto en hombres como en mujeres.
Cecilia Ce
“Existen otras formas de estimulación que pueden disparar un orgasmo de manera inesperada; a veces por la fricción durante una actividad física o por activación del suelo pélvico, a veces por la tensión nerviosa, por vibraciones con moto o colectivo, así como a través de sueños o meditaciones”, comentó en su posteo la licenciada, agregando que incluso la estimulación en el cuello, pies y orejas puede desencadenar la llegada al clímax.
De este modo, la sexóloga hizo énfasis en la variedad existente a la hora de disfrutar del placer de una manera plena, sin dejar de resaltar que resulta fundamental tener en cuenta que el orgasmo no se puede exigir, pues se hace imposible de disfrutarlo y se alejará cada vez más.
Llevando a cabo una didáctica encuesta entre sus seguidores, la licenciada Ce recopiló algunas experiencias de orgasmos atípicos y entre los mismos se destacan placeres encontrados en situaciones inesperadas.
Haciendo abdominales elevando las piernas en la máquina; por medio de besos en el cuello, espalda y lóbulo de la oreja; en la clase de spinning; andando a caballo; en sueños o por la vibración de la moto: estas fueron solo algunas de las experiencias recabadas por la sexóloga Ce.
Teniendo en cuenta la serie de declaraciones expuestas anteriormente, ¿creés que sea posible “disfrutar” de este nuevo nivel de placer, en el cual el orgasmo puede llegar a vos de manera inesperada y a través del mínimo estímulo?
SEGÚN LA CIENCIA
Un estudio realizado por neurólogos de la Universidad de Rutgers a un determinado grupo de mujeres, los centros del placer cerebrales que se activaban cuando las mismas pensaban en imágenes eróticas eran exactamente los mismos que cuando se tenía un orgasmo. Dicho de otra forma, se trata de regiones tan cercanas en el cerebro que resulta probable llegar al orgasmo a través de una mera estimulación psicológica.
No obstante, expertos también aseguran que, aparte de la estimulación psicológica, es posible disfrutar de la llegada al clímax en medio de situaciones rutinarias e inesperadas. De acuerdo al medio español El Confidencial, puede deberse esencialmente a problemas nerviosos en los músculos genitales.
Algunos de los testimonios indican que esta clase de orgasmos se producen en situaciones de alta ansiedad o estrés. Dentro de la llegada al clímax de maneras poco comunes se puede llegar a hablar del Trastorno de Excitación Genital Permanente (TEGP) o Síndrome de Excitación Sexual Persistente (PSAS), que consiste en experimentar excitación sexual, acompañada o no de orgasmos.
El mencionado síndrome puede llegar a ser considerado como una patología que obligue a una persona a buscar constantemente la satisfacción de sus deseos sexuales y más allá de la posible diversión imaginada resulta contraproducente por la falta de control hacia las sensaciones de placer.
Estos son solo algunos de los niveles de excitación y consecuente orgasmo ante los cuales una persona puede llegar. Sin embargo, existe otra variante dentro de la llegada al clímax y consiste en los orgasmos atípicos: la posibilidad de conseguir este máximo nivel de placer con mínimos e insignificantes estímulos.