El año nuevo trae consigo innovaciones que podrían ser aplicadas a cada ámbito de la vida, pero específicamente en el plano sexual también resulta posible contar con algunas oportunidades de renovar deseos y propósitos para así ampliar las amplitudes placenteras a lo largo del año.
De la mano de la psicóloga clínica y especialista en sexología, Jazmín Escobar, te traemos una lista de propósitos y recomendaciones que podrías tener en cuenta durante tu 2022, para vivir tus experiencias sexuales al máximo.
Propósito N°1: Hacer Sexshopping una vez al mes
“Los juguetes sexuales son herramientas diseñadas especialmente para potenciar las sensaciones eróticas durante el encuentro sexual en pareja o durante el autoerotismo a través de la masturbación”, especificó la profesional.
Así, detalló que los juguetes sexuales son las alternativas más disponibles para diversificar el placer y aumentar la creatividad. Aparte de animarse a realizar mayores compras de juguetes, también se debería dejar de lado los prejuicios en torno a los mismos y las sensaciones de que pueden interferir en tus relaciones amorosas.
Lic. Jazmín Escobar
“El gran beneficio de los mismos se traduce en expandir las perspectivas sensoriales y sexuales, probar nuevas sensibilidades, crear fantasías y juego de roles, e ir introduciendo elementos que van más allá de la genitalidad, alcanzando zonas nunca antes descubiertas”, destacó la licenciada, animando a ver al juguete como un aliado erótico y no como una competencia o un intruso.
La experta también indicó que los juguetes podrían introducir un agregado extra ayudando a consolidar la confianza y aumentar la intimidad al hacer que ambos en la pareja se sientan cómodos y relajados, aprendiendo a comunicar lo que a cada uno le gusta o le disgusta.
Propósito N°2: Cambiar de lugares
Con el año nuevo, debés comprender que la cama no es el único escenario en el cual puedas desenvolverte sexualmente, pues existen varios lugares en los cuales podrías experimentar al máximo tu placer. Para la psicóloga Escobar, cuando el sexo es lineal, predecible, anticipado o presumible, la curva del deseo con el tiempo desciende, pues todo comportamiento erótico está destinado a un mismo fin: la cama.
“Generalmente las parejas están condicionadas por elementos externos como la exposición, los hijos, los ruidos, etc., que determinan el futuro de la intimidad y toda caricia termina en el cuadrilátero de la cama dejando de lado la innovación y la diversidad geográfica”, anticipó.
La experta señaló que, si bien la cama es cómplice de las interacciones sexuales por la privacidad y la comodidad, la misma deja de lado otros factores que introducen misterio, aventuras, enigmas, intrigas y otras aliadas más del placer y el goce.
“Jugar con los espacios, olores, texturas, sabores, aumenta la posibilidad de crear nuevos escenarios sin ir tan lejos de casa, con el solo hecho de alternar situaciones, horarios, vestimentas, posiciones e incluso roles, el erotismo se vuelve dinámico y rompe con el estancamiento sexual”, afirmó la especialista.
Propósito N°3: Salir del coito-centrismo
La licenciada Escobar explicó que el coito-centrismo, es una dinámica sexual orientada específicamente al coito, es decir, no hay sexo sin penetración. De esta manera se deja de lado al órgano sexual más grande del cuerpo: la piel y sus 2 metros cuadrados de sensibilidad erótica.
En este sentido, un propósito primordial es dejar de lado esta costumbre para centrar las experiencias sexuales en autodescubrimientos, disfrute mutuo de los cuerpos en pareja, expandiendo también los objetivos de generar placer únicamente por medio de la penetración cuando en verdad existe mucho más.
“Todas las zonas erógenas están localizadas fuera de la genitalidad y por lo general son desplazadas por el coito. En el hombre existe una necesidad significativa de utilizar el pene en las interacciones sexuales, ya que toda su virilidad y hombría están potenciadas a través del tamaño, la duración y la ejecución”, determinó la psicóloga.
La licenciada Escobar citó que, más allá del pene y la vulva está el cuello, las orejas, la mirada, los labios, la lengua, las manos, las piernas, los muslos, las rodillas, el antebrazo, los tobillos, los pies, los hombros, los pechas, entre otras tantas zonas más, pues lo mejor del sexo está en descubrir, expandir, ahondar, crear, innovar, entregarse y gozar, no únicamente en meter y sacar un miembro del otro.
Propósito N°4: Introducir nuevas prácticas
“Cada pareja es un universo erótico distinto y posee tres sexualidades: la de un miembro, la del otro y la sexualidad en pareja. Estas sexualidades decantan tantas alternativas como creencias y lo que importa es lo que hace bien o mal a cada pareja para que la misma sea sexualmente funcional”, comentó la sexóloga.
Teniendo eso en cuenta, una recomendación que deberías tener en cuenta es la introducción de nuevas prácticas sexuales en tu 2022, para ello la licenciada Escobar señaló que primero se debe desarrollar la comunicación, la intimidad, la apertura mental, la confianza y el diálogo saludable. Desde esos componentes se introducirán pensamientos eróticos, fantasías, deseos, imágenes, lencerías, juguetes y hasta personas.
“Todo es aceptable siempre y cuando haya consenso y acuerdos entre ambos. Las alternativas son muy variadas e incluyen desde el cambio de lugar, el uso de artefactos como látigos, sogas, juguetes, hasta alternativas relacionales como tríos y swinger”, dijo la especialista, asegurando que todo está bien si ambos disfrutan, pues basta con que uno de los dos se sienta incómodo para que deje de ser una alternativa viable.
“Es muy importante que, dentro de la pareja, los individuos se conozcan individualmente y luego a su compañero/a para introducir ideas en la relación, pues la sexualidad es un área muy delicada y sensible, por lo cual debe ser cuidada desde el respeto y la tolerancia”, concluyó, resaltando también que la sexualidad es un arte: se desarrolla, se aprende, se deconstruye y se construye constantemente.