Las cuestiones referidas a la economía del país son urgentes y necesarias, la gente necesita encontrar una respuesta que haga menos doloroso el tránsito en este periodo en que la economía ha decrecido en 1,7%. Comparativamente, en el primer semestre de otros países como Colombia creció en un 8%, incluso Argentina en un 6%. La economía paraguaya está fuertemente golpeada desde hace una buena cantidad de tiempo, y no hay muchas ideas originales.
Ahora se plantea una reducción del 30% del IVA deducible en el las compras formales del país; es una manera de poder enfrentar este tipo de dramas, pero sin embargo hay otros actores político -como Paraguayo Cubas- que creen que el contrabandos debe continuar y que está feliz y que lo aplaude.
Evidentemente cuando uno encuentra una irracionalidad de este tipo, que afecta directamente al productor local que no va tener mercados si siguen entrando tomates de Argentina a precios mucho más bajos que los nuestros, y lógicamente nuestras pequeñas y medianas industrias y empresas no podrán ser sostenibles en el tiempo.
La economía requiere racionalidad, pulso firme y sacrificios entre todos. Cuando sólo se sacrifica a la gente y no se achica al Estado, no se corta la grasa que tiene en su interior, es poco probable que alcancemos metas favorables para todos en el corto plazo.