Desde el Club Escuela Solidaria (CES) manifestaron que volver a clases es volver a lo mismo. “No hubo ninguna reforma o inicio de transformación en más de 7 meses que pararon las clases presenciales”, dijeron desde la primera escuela abierta del Paraguay, con una metodología de enseñanza 360°.
El gerente del CES, Sebastián Da Ponte, explicó que el sistema educativo no sirve, falló, caducó, y que ello se ve reflejado en todos los informes internos del MEC.
Además, el informe del programa internacional para la Evaluación de Estudiantes o también llamado PISA, antes de la pandemia, indicó que 9 de cada 10 niños no cumplen con competencias básicas de matemáticas, 8 de cada 10 no llegaban a niveles mínimos de ciencias y 7 de cada 10 no comprenden lo que leen.
Acotó que el trabajo del MEC es insuficiente y se ha desperdiciado un gran tiempo en esto que conocemos como cuarentena. “Este era el momento más prudencial para haber evitado improvisar en las clases virtuales y evitar esta catástrofe que tenemos en educación”
El gerente del CES aseguró que se está matando a toda una generación, pues se vienen tiempos difíciles donde se va a tener que reinventar el mercado, y si no estaba lista para la vida misma antes del Covid, después, menos.
Mencionó que, posiblemente, el país pueda estar preparado para volver a clases presenciales, manteniendo todo el protocolo sanitario, pero están pensando en ¿cómo se va a volver?, ¿para qué volver?, esa es la pregunta, para aumentar la pobreza, adición, violencia, desempleo y deserción escolar.
“No se puede volver a clases sólo para continuar utilizando a la escuela pública como comedor y guardería, donde los padres les llevan a sus hijos para que los cuiden, e incluso en el sector privado, donde desesperados buscan una educación un poco mejor, pero sigue siendo un maquillaje, porque la educación privada no puede desentenderse de lo que son las política públicas del MEC”, precisó.
Continuó diciendo que el sistema se cae a pedazos, y no habla del techo o las paredes, sino del modelo didáctico, la metodología, la malla curricular es lo que fracasa, y esa es la que hay que arreglar.
Agregó que el único protocolo que importa es el de planificación e implementación de una reforma educativa que inserte la inteligencia emocional, la matemática financiera, oratoria y socialización, pedir que vayan intercalados, se laven las manos antes de entrar y tomar la temperatura, no es el gran trabajo.
“Como en cualquier obra, cuando se refacciona un local o institución, se cierra por un tiempo por arreglos, desde marzo a hoy en día se sigue desperdiciando tiempo, momento en el cual el cierre no tendrá tan alto costo, ya que el sistema virtual prácticamente no sirve”, acotó Da Ponte.
Apuntó que hay que parar la pelota y replantear el sistema, la cuestión no pasa por infraestructura o materiales, que también vienen de la mano con un sistema pedagógico oprimido.
“No se puede hacer una reforma si no terminamos con todo el proceso de improvisación y que el MEC lidere una mesa sana con científicos y personas que no sean afines. No podemos tener una misma línea de pensamientos y pretender que los únicos colaboradores tienen que ser los que están dentro de sus políticas, hay que entender que la reforma debe ser llevada a cabo por científicos”, concluyó Da Ponte.
CLUB ESCUELA SOLIDARIA
Es importante resaltar que como parte de la misión del CES crean materiales didácticos y tienen contemplado un plan de estudios para niños y adolescentes, con una metodología de enseñanza innovadora.
Con el objetivo de paliar la situación tras el incendio de Cateura, el pasado domingo llegaron a 150 entregas casa por casa, entre alimentos, ropas, bebidas y otros materiales a familias de sus alumnos.
