El título expresa dos palabras fundamentales en la vida del ser humano en cualquier campo colectivo desde la familia, la escuela, el trabajo o lo que funcione con más de una persona para lograr cumplir su fin. Es finalmente lo que nos mueve como colectivo, grupo o sociedad.
Una generación que en esta época no ha parado de destacarse es la mía o los millennials porque la paciencia no forma parte de nuestras cualidades, el trabajar con rutina, constancia y todo valor que nos haga imprescindibles en cualquier trabajo que tendemos a perderlo con facilidad por ser considerada la “generación de cristal” por la fragilidad que presentamos ante llamadas de atención o lo que sea habitual tener en espacios de trabajo que demanden resultados óptimos para empresa. Nos cuesta mucho tener los valores de nuestros ancestros y nos disgusta que nos lo recuerden.
Paraguay tiene en la actualidad lo que en demografía se denomina “bono demográfico” o el período durante la transición demográfica en que la proporción de personas en edad de trabajar (potencialmente productivas) es muy superior a la que se encuentra jubilada. Estamos entre muchos jóvenes o millenials que servimos más para responder a intereses económicos de empresas y no tanto para responder a lo que necesitemos para asegurar nuestro futuro, tiempo al que todo ser vivo llega algún día y debe estar preparado y tener todo lo que haga cómoda y llevadera nuestra vida y la de nuestro entorno. Trabajo, educación deben ser parte de nuestra preocupación cuando se trata de elegir un nuevo gobierno que debe responder no solo a nuestras necesidades sino para los de todo un país.
Participar para cambiar
En pocos días seremos los que decidirán quién sería nuestro próximo presidente y autoridades lo que demanda conocer bien a los candidatos y discutir en vivo y en directo si es posible quien tendría la oportunidad de ser el ejecutivo ideal para todo paraguayo aquí y fuera del país. Debemos participar, zapatear para que tiemble este país.
Pueden ser escenarios en los que también podemos aprender cómo y qué hacen los millennials extranjeros con sus gobiernos sin quebrarnos y lograr superar las expectativas de nuestros padres desde lo académico hasta lo laboral y familiar. entendiendo lo importante que significa el tomar compromisos entre las personas que integremos desde un matrimonio hasta equipos de fútbol u otro deporte para cualquier tipo de torneo o tarea colectiva que se nos presidenta. Todo eso implica conocer bien al compañero o compañera con quien nos toque trabajar, vivir o competir. Debemos tener conciencia de nuestro valor individual y colectivo y actuar en consecuencia.
Por todo ese motivo debemos tener la madurez de asumir compromisos colectivos para aportar nuestros talentos y habilidades para asegurar el ganar lo que persigamos. El Paraguay nos convoca para ser protagonistas, no aceptemos más ser figuras de reparto.
