Estamos en pleno verano y en vacaciones escolares, es la época en que los niños, -principalmente- aman ir a la pileta. Es como si automáticamente se convirtieran en peces que saben perfectamente qué hacer.
Sin embargo, es un riesgo al que debemos estar muy alertas a la hora de llevar a nuestros hijos a una pileta para su recreación y diversión.
Como mamá, lo primero en cuidar es la piel, ya que los pequeños están súper expuestos a los daños del sol. Así que lo imprescindible de llevar en la cartera es el protector solar.
Lo siguiente a tener en cuenta es de acuerdo a las edades, sobre todo si son muy pequeños, los flotadores que deben usar, pero igual hay que estar cerca porque un descuido puede ser muy peligroso.
Nunca podemos dejar solos a los pequeños con algún material auxiliar de piscina, como: flotadores, manguitos, boyas, etc, aunque creamos que son muy seguros, pueden pincharse, con impulso darse la vuelta y tornarse peligroso.
Los niños no entienden de los peligros y un descuido puede marcar toda la diferencia. También la profundidad de las piletas donde llevamos a nuestros niños es muy importante conocer. Sobre todo inculcarles el respeto al agua.
Pero creo y estoy convencida que si se tiene la posibilidad de hacerles practicar natación con profesionales es la mejor inversión para ellos porque se van a poder defender, que si no supieran nadar.
Otro punto relevante es no correr por superficies mojadas, no tirarse cerca de los bordillos y correr por las zonas de escalera por riesgos de caídas que pueden hacer de un día de piscina maravilloso, un día de piscina accidentado.
Según los expertos, es aconsejable el ingreso antes de las 10:00 horas y después de las 16, evitando el Sol en horarios críticos.
Y nunca falta la pregunta después del almuerzo dominical ¿Mamá cuánto falta para entrar a la pileta? No es recomendable que ingresen al agua luego de una comida cargada y en pleno calor del mediodía. Lo que aprendí con mis hijos es que quiere decir mucho la confianza que les das a la hora de realizar ciertas cosas que les puede dar miedo.
No sólo a la hora de ir a una pileta, también cuando van a subir por primera vez a un tobogán o a un globo loco, transmitirles confianza les ayuda a vencer sus miedos y poder disfrutar de todas las actividades que pueden realizar.
