Estoy muy seguro de que muchos de ustedes disfrutaron como yo la noche de ayer el
triunfo de la selección nacional de futbol sobre el equipo chileno por la mínima de uno
a cero en el marcador. Algunos lo han vivido en el histórico estadio Defensores del
chaco, otros habrán preferido reunirse en casa con la familia siguiendo el partido por
televisión o quizá prefirieron en soledad escuchar los emotivos relatos en sus radios.
Si tienen más de veinticinco años como yo, habrá llegado a sus memorias unos
buenos recuerdos de ya hace más de quince años, en aquellas eliminatorias rumbo al
mundial de Sudáfrica 2010, en la que la albirroja realizó su mejor campaña rumbo a un
mundial FIFA. Aquel mítico equipo albirrojo de Justo Villar, Nelson Haedo Valdez,
Roque Santa Cruz, Oscar “Tacuara” Cardozo y Salvador Cabañas.
Ese 2010 fue el ultimo mundial al que Paraguay logró ir, logrando en ese entonces un
histórico resultado al vencer a Japón por penales en octavos de final, luego caer
eliminados en cuartos ante España, equipo que levantaría la copa de campeón del
mundo al final del torneo. Luego todos sabemos lo que ocurrió, nos asistimos a Brasil
2014, Rusia 2018 y Qatar 2022. Para todo amante del esférico, una tragedia.
En esta clasificación de Conmebol para el mundial Norteamérica 2026, el equipo fue
de regular, a bueno y actualmente muy bueno para no decir que el desempeño es
excelente. Aún hay cosas técnicas que mejorar, pero vamos, hace años que no
derrotábamos en casa a campeones del mundo como Argentina y Brasil, logramos
empatar a Bolivia que nos llevo a 4150 metros para tener ventaja en un polémico
partido.
Todos estos buenos resultados que, tras tantas desilusiones nos vuelven a dar
esperanza de regresar a un mundial, se lo debemos en gran parte al implacable
trabajo de un señor como lo es “el profe” Gustavo Alfaro, exfutbolista y entrenador
argentino. Seguramente, nos recuerda a esa época donde otro argentino con corazón
paraguayo dirigía al equipo, el querido Tata Martino.
A los que no disfrutan del futbol o lo odian por motivos como la violencia, que debe ser
desterrada del deporte. Les pido que piensen lo que genera un mundial, en la movida
de dinero, las ganancias al comprarse kilos de carnes para los asados, televisores,
remeras y mucho más. Este era el equipo que queríamos ver, el que necesitábamos
para volver a creer, ese futbol con garra que nos representaba ha vuelto, aún queda
mucho por hacer, tenemos un mundial al que clasificar y ganar.

Licenciado en ciencias politicas, editor, comunicador y productor de contenido creativo.