(EFE).- Un día después de que Leo Messi se despidiera oficialmente del Barcelona, y entre fuertes rumores sobre su inminente llegada al PSG, la afición parisina espera ilusionada al astro argentino: “Es un dios, una leyenda”, comentan en el aeropuerto de Le Bourget.
Ese aeródromo, a 17 kilómetros al norte de París, es el lugar previsto para el aterrizaje antes de cerrar los últimos detalles del contrato y pasar el reconocimiento médico. Cientos de hinchas se desplazaron allí este domingo, y este lunes volvió a ser escenario de la espera.
Mehmbt, de 16 años, llegó a las dos de la mañana, acompañado de su hermano mayor y ha dormido en el coche para intentar hacerse una foto con él: “Es una leyenda. Que venga a París ha sido una sorpresa, pero también un sueño”, cuenta a EFE.
“Todos estamos impacientes”, añade Hugo, otro aficionado. La ilusión comenzó a ser factible cuando el jueves se anunció que Messi no iba a continuar en el Barcelona, y ese mismo día el protagonismo se volcó en el PSG.
“Con Messi, Neymar, Mbappé, Di María, Marquinhos, Verratti y todo el equipo, estamos obligados a soñar”, recalca sobre la voluntad de los qataríes de triunfar más allá del campeonato nacional y de hacerse por fin con la Liga de Campeones.
Mohamed, de 18 años, es un habitual del Parque de los Príncipes desde 2006. Ha llegado a Le Bourget con la camiseta del equipo. Ayer no pudo acercarse porque trabajaba, pero este lunes, día en que han continuado los rumores, se acercó “temprano”.
“Su llegada es una locura. En una semana todo se ha acelerado. Ver la evolución del PSG desde 2006 hasta ahora es increíble”, añade el joven sobre un equipo “que hace años no podíamos ni imaginar. Decir que vamos a tener a Messi es un sueño”.
El club ha reforzado sus filas también con el español Sergio Ramos, que fichó por dos temporadas el pasado 8 de julio. “Es el mejor defensa de la historia. Solo podemos inclinarnos ante este señor”, añade Mohamed sobre el exmadridista.
De otra de sus estrellas, Kylian Mbappé, se sabe que va a continuar una temporada más, pero de momento se niega a prolongar en el club. “Como se vaya va a ser muy duro porque perderemos tal vez al mejor jugador de los próximos diez años”, sostiene.
ESPERANDO A MESSI DÍA Y NOCHE
Pero este lunes toda la atención estaba centrada en el internacional argentino. A Le Bourget, en un día a ratos frío y lluvioso, llegó gente con la camiseta del equipo, gente sobre todo joven, y algún padre con sus hijos.
La Prefectura de Policía había apuntado que para el día no había ningún vuelo previsto, ni privado ni público, pero los rumores, la presencia de prensa y de agentes de seguridad siguieron atrayendo a los aficionados.
“Voy a estar todo el día, y si hace falta también esta noche y mañana. Solo importa Messi y el París”, dice Mohamed, con la misma paciencia que el cerca de centenar de hinchas que se congregó junto a las vallas de seguridad.
“Lo recibimos como se debe”, afirma Erwan. Messi “tiene experiencia en la Champions y nosotros la queremos. Creo que es necesario a nivel táctico y estratégico, para acompañarnos, porque sabe gestionar la presión de la Liga de Campeones”.
El técnico argentino, Mauricio Pochettino, tiene en sus filas grandes nombres. “Hay que darle una oportunidad. De un día para otro no va a conseguir llevarnos a la Champions. Queda trabajo pendiente. Esperemos a ver qué hace”, añade este estudiante de 19 años, que nació en el norte de Francia pero dice llevar al PSG en su “corazón”. EFE