En medio del escenario político que se da hoy con el encarcelamiento del presidente del principal partido de la oposición, como lo es titular del PLRA, Efraín Alegre, de nuevo salta a la mesa los cuestionamientos hacia el manejo del Ministerio Público y como sirve de aparato de persecución política y social.
En este sentido, el senador del Frente Guasu, Hugo Richer, sostuvo que la oposición está obligada a desarrollar una agenda con temas que son claves dentro para el devenir de la república, y que uno de ellos tiene que ver necesariamente con la fiscal general del Estado, Sandra Quiñónez.
“La decisión política muchas veces precede y da impulso a una investigación fiscal – judicial, y pasando al plano fiscal, hay una decepción de la gente”, refirió.
Dentro de un análisis, el congresista de izquierda indicó que en medio de tanta corrupción e impunidad, donde la ciudadanía cuestiona el sistema de justicia, pero no termina de tener elementos para creer en el cambio, se necesita un gesto que venga desde la clase política.
“Hace falta gestos, y los gestos tienen que partir desde la decisión política. El gesto tiene que ser el juicio político a la señora que ocupa el cargo de fiscal general del Estado”, remarcó el senador.
INSTRUMENTO DEL PODER
Para Richer, la Fiscalía se ha convertido abiertamente en un instrumento de presión al servicio de grupos políticos, y ahora también de grupos económicos.
“Estamos entrando en un escenario mucho más abierto de instrumentalización del Ministerio Público y sus consecuencias después en el Poder Judicial, ya no solamente al servicio de un grupo político sino al servicio de grupos políticos e intereses económicos poderosos, que construyen influencias, y eso tenemos de derribar”, dijo durante una entrevista con 730 AM.
Como estamos a horas de un nuevo aniversario de la caída del régimen dictatorial de Alfredo Stroessner, y haciendo una retrospectiva de la era democrática, indicó que hay dos falencias que no se pudieron superar, primero la pobreza y desigualdad, y lo segundo la corrupción y la impunidad.
En este caso cuestionó que hay varios ejemplos de escándalos de corrupción donde el Ministerio Público hizo la vista gorda, y no se abrieron procesos, aunque sean escándalos internacionales. Ejemplos, no hubo consecuencia punitivas del acta entreguista como tampoco se investigó el sospechoso arreglo que el Poder Ejecutivo quiso cerrar con Juan Guaidó sobre la deuda de Petropar a PDVSA.
UNIDAD NECESARIA
“La oposición tiene la obligación de ponerse de acuerdo sobre algunos temas fundamentales, y uno de los temas es la Fiscalía General del Estado”, sostuvo Hugo Richer al momento de abordar la posibilidad de un juicio político a Sandra Quiñónez.
Si bien, reconoció que la oposición no tiene los votos suficientes para iniciar el proceso en la Cámara de Diputados, ese escenario se puede modificar al momento en que la ciudadanía se involucre como elemento de presión.
“Hoy no hay votos en Diputados, pero si hay una presión ciudadana fuerte, la reacción de la gente obliga a la posibilidad de acuerdos solicitados. Eso quiere decir que estos acuerdos incorporan a sectores del Partido Colorado, ese es un escenario, el del juicio político”, mencionó el senador nacional.
Para Richer es fundamental lograr acuerdos, como oposición, y sumar a sectores del coloradismo, porque de lo contrario las consecuencias serán aún más graves.
Es el momento adecuado, ante esta decepción, la crisis económica, la crisis sanitaria y el impacto social de la corrupción, sostiene el senador.
“Yo podría en primer lugar de la agenda el juicio político a la fiscal general del Estado, porque ese es un punto de partida para enfrentar una serie de situaciones que tenemos. Si se toma conciencia de la gravedad del problema, podemos sentarnos en una mesa de negociación, y acordar tres o cuatro puntos, y no estoy hablando de programas electorales, sino de acuerdos políticos que el país necesita y el pueblo paraguayo espera”, concluyó Hugo Richer.