Nara Mieres se destaca en el rubro de la moda por ser una emprendedora que con solo 21 años ya es reconocida por el impecable trabajo que viene cosechando y con el cual logró abrir su primera tienda.
La joven manifestó que realmente siempre tuvo definido qué quería ser y de qué quería trabajar el resto de su vida -de ser posible-.
“Crecer en el rubro de la moda y el comercio fue lo que fomentó mi arraigo hacia el sector, mi familia siempre trabajó en el ámbito del comercio y desde chica consumí todo ese mundo, recuerdo pasar mi infancia entre telas y más telas”, comentó.
Nara es actualmente dueña de su propia tienda de ropas llamada “Algo Diferente”, que también se divide en “Algo Diferente Street”, donde ofrece distintos tipos de prendas exclusivas.
“Considero que Algo diferente más que ser parte de mi vida, es mi vida misma. Crecimos juntas, me vio crecer y a la par ella conmigo, sinceramente es un reflejo de mi vida, de mi personalidad y de mi estilo”, añadió.
Mencionó que ocupar el lugar donde está ahora, es toda una experiencia de aprendizaje, de crecimiento personal y desafío constante. Asimismo, poder ser motivación para otros jóvenes a emprender y a luchar por lo que aman -independientemente a la edad o el qué dirán- es de gran satisfacción para ella.
“Realmente intento disfrutar el proceso de todas las etapas y momentos, desde los pequeños logros, hasta lo más grandes, poder mirar para atrás y ver el fruto del sacrificio. Pero la mayor satisfacción siempre será la aprobación, gratitud y satisfacción del cliente”, enfatizó.
Sobre su inspiración en el mundo de la moda, refirió que a veces no son precisamente personas, sino momentos, lugares, colores, texturas o recuerdos que le generan sentimientos.
“Al plasmarlos al papel y luego a la realidad, quiero que tengan un sentimiento personal, que cada clienta que vista mis prendas pueda llevarse consigo un pedacito de mi vida”, indicó
Finalmente, señaló que se considera una joven emprendedora y una eterna aprendiz, donde no hay día que no aprenda algo nuevo, que le sirva de empujón para estar donde quiere estar el día de mañana.
“Por sobre todo, me considero una persona bendecida y privilegiada por vivir tantas experiencias gratificantes a mi corta edad”, concluyó.
