Palmeiras, con un gol de Gustavo Gómez en el minuto 90 y otro de Murilo en el tiempo de descuento, firmó una remontada épica por 1-2 para derrotar al Sao Paulo en el clásico paulista y mantenerse líder del Brasileño.
El equipo del portugués Abel Ferreira, campeón de las últimas dos ediciones de la Copa Libertadores, sufrió para llevarse los tres puntos en el Morumbí, en el partido que cerró la decimotercera jornada y que terminó con trifulca entre los jugadores de ambos planteles.
Al equipo verdiblanco, que encadena ya 19 partidos sin perder, le bastaron los últimos seis minutos para sentenciar a un Sao Paulo que se adelantó en el minuto 17 por medio de Patrick, quien aprovechó un desafortunado desvío de Gabriel Menino para estrenar el marcador.
Ese tanto tuvo que superar el análisis del VAR entre las protestas de los jugadores del Palmeiras, que reclamaron con insistencia que el centrocampista del Sao Paulo se ayudó de la mano para batir a Weverton.
Los dirigidos por Ferreira pedirían minutos después un penalti sobre Rony en una disputa con el portero local, pero el árbitro Anderson Daronco y el VAR descartaron la pena máxima.
En la segunda mitad, el Tricolor de Morumbí se conformó con el ajustado 1-0 a su favor y acabó cediendo la iniciativa al Palmeiras con la esperanza de cazar un contragolpe y rematar la faena.
Esa estrategia hizo aguas con el cabezazo de Gómez en el minuto 90 y el remate de su compañero en la zaga, el brasileño Murilo, a la salida de un córner que silenció a la afición del Morumbí en la última jugada del encuentro.
Con este triunfo, el Palmeiras suma 28 puntos y sigue líder en solitario del Campeonato Brasileño, con una ventaja de tres puntos sobre el Corinthians, que el domingo venció en casa por la mínima al Goiás (1-0).
El Sao Paulo se queda en una discreta novena posición, con un balance provisional de cuatro victorias, seis empates y tres derrotas.
Palmeiras y Sao Paulo volverán a verse las caras este jueves en el partido de ida de los octavos de final de la Copa de Brasil. EFE