Real Madrid recibió uno de los golpes más duros de su historia: quedar eliminado de la Copa del Rey contra el Alcoyano. Y como era de esperarse, Zinedine Zidane quedó en el ojo de la tormenta y con miles de hinchas pidiendo su renuncia o su destitución.
Esos mismos hinchas, se enojaron más todavía al escuchar a Zizou en rueda de prensa: «Esto es fútbol, puede pasar. No es una vergüenza». Pero como si esto no fuera poco, una fuerte versión nació en Argentina, más precisamente en ESPN.
Según informó el medio, Real Madrid tendría a Marcelo Gallardo como principal candidato para reemplazar a Zinedine Zidane, quien dejaría su cargo como entrenador.
Tras la humillación, Zidane por primera vez dejó su futuro en el aire: «Asumo la responsabilidad y pasará lo que tenga que pasar. Hay que asumirlo y vamos a ver lo que pasa en estos días, yo estoy tranquilo».
Lo cierto es que en ESPN aseguraron que Florentino Pérez iría a la carga por Marcelo Gallardo, que actualmente está definiendo su futuro en River.
Según reportes en Argentina, Gallardo estaría mentalmente cansado de la presión en el conjunto millonario, misma que él impuso al lograr 11 títulos desde 2015, cuando tomó las riendas del equipo.
UN CICLO ACABADO
Síntomas de agotamiento, de desgaste y de distanciamiento apuntan a un final de ciclo del Real Madrid de Zinedine Zidane.
Los dirigentes madridistas no apuntan a la toma de decisiones drásticas de manera inmediata y sí a la espera al final de la temporada para poner en marcha un nuevo Real Madrid sin algunos de los actuales protagonistas del equipo blanco, pero con renovadas ilusiones, tan necesarias como imprescindibles.
El Real Madrid todavía puede ganar dos títulos, pero el desgaste sufrido por Zidane y algunos de sus jugadores, es mayor a la posibilidad de ganar bien Laliga o la Champions, competiciones en las que el equipo blanco no es el favorito.
ZIDANE NO PIENSA DIMITIR
Ni Zidane piensa dimitir, ni la Junta directiva tomar una decisión inmediata, que pide el corazón, pero no así la cabeza.
La Copa ha supuesto un nuevo fallo en una competición gafada para Zidane, que seguirá, una campaña más, sin acercarse a su conquista. En esta ocasión, los jugadores blancos llegaban del fallo en la Supercopa del pasado jueves y el problema es que el madridismo no está acostumbrado a digerir dos pérdidas de títulos en apenas seis días.
