Vicente Ruíz, gerente de salud del IPS, había argumentado que la decisión de tercerizar el servicio de imágenes de la sede central del instituto se debía a que el costo de esto sería menor a lo que implica la compra de equipos, mantenimiento de otros en desuso y el pago de honorarios al personal encargado del uso de estos.
El estudio aún no se dio a conocer, aunque el gerente prometió a nuestro medio contarnos detalles el día de mañana viernes 14 sobre este informe.
Sin embargo, los denunciantes de una supuesta irregularidad en la licitación realizaron su propio informe sobre lo que costaría al Estado solo comprar y mantener equipos (y el pago de salarios de los funcionarios contratados para el efecto) en comparación con la tercerización que estaría entre (G. 250.000 millones hasta G. 500.000 millones) por 10 años.
El costo publicado en el informe de los denunciantes relata que se gastaría G. 20.000 millones por la compra y mantenimiento de equipos. Sumado a los G. 16.000 millones que implica la contratación de nuevo personal para el uso de los equipos, lleva a la suma de G. 36.000 millones. Es decir, casi 10 veces menos.
Teniendo en cuenta que los equipos solo tienen dos años de vida útil atendiendo que serán utilizadas al máximo. Nos daría la suma de G. 120.000 millones (equipos más personal) ante los G. 250.000 millones que sería el costo mínimo de la licitación.
Cabe recordar que también podría darse el costo máximo (G.500.000 millones). Si es así la diferencia sería aún mayor.
El Frente Guasu está apoyando a los profesionales denunciantes. Entre ellos, Jorge Querey, senador de la nucleación política expresó que la tercerización rondaría los US$ 40 millones (teniendo en cuenta solo el costo mínimo, puede ser mayor) y que el informe reflejado por los profesionales solo es de US$ 16 millones.
“Sabemos bien que el sector privado busca la ganancia como su finalidad y no estamos en contra de ello. Pero ante esta situación en particular estamos seguros que la tercerización no es la mejor opción por el alto costo”, explicó.
Con relación a la queja de que los profesionales médicos del sector privado atienden mejor a los del sector público fue negado por el senador (quien también es médico), argumentando que en todo caso, los responsables de cada área deben cambiar a los profesionales que no cumplen con la buena atención.
“El Centro Oncológico Acosta Ñú ofrece una atención de primer nivel. Mucho mejor que los sanatorios privados. Por eso pienso que la atención en hospitales públicos en algunos casos es mejor incluso”, culminó.
DEFENSA DEL IPS
Vicente Ruíz, gerente de salud de la previsional, explicó el viernes pasado que el costo para mantener o comprar nuevos equipos (con sus respectivos gastos de mantenimiento posterior y contratación de personal) sería más costoso que la tercerización.
Al ser consultado sobre el informe y estudio que avala esa información nos respondió que nos daría detalles mañana viernes.
SUPUESTA COMPENSACIÓN
El pasado 12 de octubre se realizó una licitación similar donde la empresa Meprotec (Medicina Profesional Tecnológica) fue adjudicada por un monto cercano también a los G. 500.000 millones. Esto para el servicio de tercerización de imágenes para el local de Ingavi del IPS.
La licitación ahora cuestionada es para la sede central.
Cabe recordar que al momento de que el IPS anunció que el ganador de la licitación fue Meprotec, Codas Thompson, un consorcio que también competía con la adjudicación, anunciaba que iba a denunciar irregularidades de aquella licitación.
Curiosamente la Dra. Delia Adorno, jefa de imágenes del IPS es socia de Codas Thompson.
Haber quedado fuera habría generado un disgusto por parte de directivos de la mencionada firma por lo que, las autoridades del IPS decidieron llamar a una nueva licitación para poder “limar asperezas”, esto nos informó una fuente cuyos datos preferimos omitir y es una información “extraoficial” que se maneja.
El IPS no tiene impedimentos legales para continuar con la licitación. Tampoco de escuchar las recomendaciones hechas por los profesionales del área. Pero si se da la adjudicación y para más es para Codas Thompson tendrá que lidiar con una crisis institucional cuyas dimensiones sería difícil de estimar.