Luka Doncic estrella de Dallas Mavericks y el hombre del momento de la NBA, ha visto como sólo una lesión ha podido interrumpir una racha que no sabíamos cuándo tendría fin, en el juego ante los Heat. Afortunadamente los rayos X alejaban rápidamente el primer gran temor, no había fisura ni rotura, sólo un tobillo bastante hinchado y un esguince de carácter moderado. “Creemos que no será serio”, adelantaba Rick Carlisle a los medios”, para añadir a continuación que, por descontado, descartaban al esloveno para el viaje del lunes en un encuentro donde, por la entidad del rival, Milwaukee Bucks, habría sido más imprescindible que nunca.
Veinte partidos encadenados con al menos 20 puntos, 5 rebotes y 5 asistencias. Esos eran los niveles en que se movía la figura de los MAvericks. Solo Oscar Roberson quedará por delante de él, hasta que vuelva a intentarlo.
MOMENTO DE LA LESIÓN
Los primeros cuidados arrancaron tan pronto como se produjo la lesión. Mientras sus compañeros se dirigían a vestuarios en el descanso, el base ya estaba trabajando en la cinta de correr bajo el agua bajo la supervisión del cuerpo médico de los «Mavs». El diagnóstico y el plazo de recuperación, por el momento y más allá de su ausencia segura ante los Bucks de Antetokounmpo, aún no se maneja, aunque por la el presunto grado y la tipología de la lesión, es de imaginar que estará sin jugar entre 10 a 15 días.
20 Partidos con al menos 20 puntos, 5 rebotes y 5 asistencias encadenaba Doncic.