El Ministerio de la Mujer arranca mañana la serie de actividades de concienciación en todo el país en el marco del «Mes Naranja» que conmemora el 25 de noviembre, Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
La violencia contra las mujeres está muy naturalizada y no conoce fronteras, las cifras que son cada vez más alarmantes en el país. Cada semana mujeres mueren a manos de sus parejas y exparejas, Paraguay se encuentra en emergencia. Las mujeres tienen derecho a vivir una vida digna, sin violencia y sin discriminaciones. Y buscan trabajar conjuntamente de manera comprometida para lograr que la violencia deje de ser la violación más generalizada de los derechos humanos.
La violencia contra las mujeres es una de las violaciones a los derechos humanos más extendidas a nivel mundial, que se presenta de numerosas maneras, especialmente las del tipo físico, sexual y psicológico. Las mujeres que experimentan violencia sufren de una variedad de problemas de salud y tienen menos oportunidades de participar en la vida pública.
La ley 5777/16 “de Protección Integral a las Mujeres, contra toda forma de Violencia”, promulgada el 27 de diciembre de 2016, implica una multiplicidad de estrategias y enfoques a fin de que el Estado haga efectivas las disposiciones constitucionales y tratados internacionales para la igualdad entre hombres y mujeres y el derecho a vivir una vida sin violencia. La ley apuesta a un cambio de mentalidad, donde desde el seno familiar se rechace la violencia contra las mujeres, buscando una tolerancia cero y su absoluta erradicación.
El 50% de las víctimas de feminicidios en Paraguay eran madres, la mayoría de ellas no superan los 30 años, según datos socializados por el Ministerio de la Mujer.
El Observatorio de la Mujer del Ministerio de la Mujer reveló que el 2018 el total de víctimas de feminicidios llegó a 59 mujeres, mientras que en el 2017 fueron 50.
El informe señala que nueve más que en el 2017 resultaron víctimas fatales en manos de sus parejas (40,8%), por sus ex parejas (14, 1%), familiar (14,1%) y amigo/conocido (11,3%).
La directora general del Observatorio, Raquel Iglesias, dijo que la mayoría de las víctimas, son menores de 30 años. “Vemos que las mujeres que perdieron la vida por violencia feminicida son jóvenes y muy jóvenes en su mayoría, y aproximadamente el 50 por ciento eran madres, dejando huérfanos a un total de aproximadamente cuarenta hijos”, añadió.
Este 2019, el Observatorio registra, 7 casos de tentativa , 29 casos de feminicidio confirmados y uno en etapa investigativa, que corresponde al caso de la joven Mayra González de 23 años.
Según estas cifras más de la mitad de los agresores victimarios han sido compañeros sentimentales. En general el 80,3 por ciento de los agresores tenían con las víctimas una relación cercana.