Juan Carlos Matto, intendente de Atyrá, señaló que el secreto para mantener la cultura de la limpieza en la población es el constante diálogo. Señaló que los centros educativos compuestos por directores, profesores y alumnos son claves como agentes multiplicadores de la concienciación.
Atyrá es conocida por ser la “Ciudad más limpia del Paraguay”. Así también es considerada la “Capital Ecológica del país”. Sin embargo, esta distinción no se logra fácilmente. Requiere de mucho trabajo. Y nadie mejor que Juan Carlos Matto, intendente desde hace una década del distrito para contar el secreto de esta cultura ecológica.
El jefe comunal señaló que el secreto es no presionar demasiado a la ciudadanía. Esto en el sentido de evitar castigos con multas. Y priorizar el diálogo en todo momento.
“Hay que entender que muchas personas solo piensan en el hoy y que tendrán para comer. Por eso hay que dialogar. Nuestros mejores aliados son los integrantes de la comunidad educativa; directores, profesores y alumnos. Ellos son agentes multiplicadores de la concienciación”, reveló.
Acto seguido detalló que otras de las claves es la clasificación de basuras que deben realizar los pobladores. Por ejemplo; los lunes y viernes solo se retira basura orgánica y solo los miércoles la basura inorgánica.
La primera son desechos que provienen de la naturaleza como el papel, cáscaras de huevo, de plátano, etc. Mientras que la segunda son desechos creados por el hombre como el plástico o el vidrio por citar solo un par.
“El año pasado hemos adquirido un camión recolector de segunda mano Scania. Ella nos permite la recolección diferenciada y clasificación según su origen”, dijo.
Matto resaltó que el diálogo ayuda a entender a la ciudadanía de que si no cumplen con la clasificación, la recolección deberá hacerse por una empresa privada. Y sus costos son muy superiores a los que ofrece la comuna (G. 100.000 contra G. 20.000 mensual).
“Otra de las características que identifican a los pobladores es no sacar las basuras mucho antes que pase el recolector. Por ejemplo, recién dos horas antes se acostumbran a sacar a sus veredas. Uno camina por la mañana y no encuentra basura por las calles”, manifestó.
Al ser consultado del por qué esa cultura de limpieza que tienen los atyreños no se replica en la capital o en el área metropolitana, señaló que depende mucho de convencer a la gente de lo bien que hace. Así como de la confianza que exista entre ellos y sus autoridades.
“Antes salíamos a las plazas y nos juntábamos con los pobladores. Mientras uno barría, otro pintaba. La ciudadanía también tiene que participar”, expresó.
PANDEMIA
El intendente señaló que no todo fue malo durante la pandemia. Expresó que debido a las restricciones, el contrabando aminoró. Y con esto, los trabajos de los productores locales fueron vendidos dando un oxígeno a la población que en su mayoría se dedica a la artesanía.
“Las mercaderías de contrabando como zapatillas, carteras, cintos y más todos chinos, que vienen subvaluados estuvieron restringidos. Eso nos dio la oportunidad de trabajar”, explicó.
El jefe comunal estima que las ventas cayeron en un 40% debido a la emergencia sanitaria. Sin embargo, esto pudo haber sido mayor si el contrabando no aminoraba.
Además de esto, con la modificación de la Ley del Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (Fonacide), establecida por el Parlamento durante la pandemia, cada intendencia pudo utilizar más recursos de esos fondos para otros menesteres que no sean la infraestructura de los centros educativos.
De esta manera y con este dinero, fueron entregados 2020 kits de alimentos divididos en tres entregas; dos en octubre y la última hace tan solo una semana. El valor de estos kits eran de G. 175.000 y cada uno pesaba 30 kilos. Esto significó una inversión total de G. 353 millones.
“Trabajamos bien en ese sentido. También hemos entregado el almuerzo escolar en formas de kits. En seis (6) meses hemos entregado un total de 2015 víveres”, informó el jefe comunal.
POLÍTICA
Finalmente Matto señaló que descarta intenciones reeleccionistas. Esto, debido a que ya está en su tercer periodo al frente de la comuna, el segundo consecutivo. Y además que en un pueblo pequeño como Atyrá, las necesidades son muy grandes y poco es lo que se puede hacer para mitigarlos con los recursos públicos.
“Tiene que venir hombres con nuevas energías, con nuevas ideas. Necesitamos que Atyrá viva del turismo. El turista tiene que venir a quedarse varios días”, expresó finalmente.