Esta historia tiene como actores a Juan Ernesto Villamayor, Euclides Acevedo, José Alberto Alderete, Nicanor Duarte Frutos, Lauro Ramírez y Julio Fernández. Los mismos que hace dos décadas atrás fueron partícipes en el Gobierno de González Macchi, Gobierno que arrojó una economía estancada, repartición de Ministerios entre partidos políticos, en aquella época el dólar se encontraba fuertemente inestable, se vivía en medio de corrupción galopante, la falta de ingresos durante ese gobierno era un reclamo constante. Además en esa época (2003) Paraguay en default selectivo y la pobreza llegó al 50%. La crisis económica en Paraguay ocurrida durante el gobierno de González Macchi, fue la peor caída de la economía paraguaya de los últimos años.
Mario Abdo Benítez lleva adelante situaciones similares por las que ya atravesó el país años atrás, veamos, actualmente Paraguay se encuentra con una economía fuertemente estancada (lo mencionamos más arriba), repartición de los Ministerios entre partidos, ¿suena conocido no?, dólar inestable que genera preocupación y además sospechan que existe especulación. El dólar inestable pone en aprietos a diferentes sectores, según referentes esta situación terminará afectando indefectiblemente a la canasta básica.
Continuamos con la falta de ingresos, 20 años antes el país atravesaba por esto, 20 años después, Paraguay vive la falta de ingresos y cada vez se acentúa más. Corrupción galopante, un clásico, y un fuerte déficit fiscal con riesgo de cesación de pagos.
Son solo algunas de las similitudes que encontramos al comparar el Gobierno de Luis Ángel González Macchi del 28 de marzo de 1999 – 15 de agosto de 2003 y del actual presidente de la República Mario Abdo Benítez. Y no olvidemos esto, la amenaza de juicio político contra Macchi que amenazaba la estabilidad política del país en febrero del año 2003, el exmandatario estaba acusado de corrupción y fraude.
Hagamos un poco de historia, la historia política reciente del Paraguay ha estado salpicada por innumerables crisis de diverso alcance pero que han tenido un efecto común: impedir al país realizarse en otros aspectos.
Las inversiones extranjeras disminuyeron por lo menos en un 20% en esa época, mientras que los empresarios locales luchaban por mantenerse a flote en un mercado contaminado por la corrupción, el contrabando y la falsificación que ubicaban al país en quinto lugar en las listas de piratería de América Latina, según publicaba El País de España sobre los hechos ocurridos en Paraguay en esa época.
La recaudación fiscal no alcanzaba a cubrir el 80% de los gastos corrientes y la deuda externa crecía a una velocidad alarmante, mientras Paraguay seguía obteniendo las peores calificaciones en las estadísticas de país riesgo.
Desde que asumió la presidencia, Luis Ángel González Macchi no había hecho más que apagar un incendio tras otro. En la práctica, su Gobierno se ha caracterizado por una gran maestría en la postergación de problemas, al igual que el Gobierno de Mario Abdo, coincidencias ¿no?.