Kipchogue, conocido como el más rápido del mundo, dejó el récord mundial de maratón en 2:01:39 y a sus 35 años de edad vive una temporada atípica por la pandemia.
Confinado en su natal Kenia, el atleta habló de su actualidad. Según refirió, ha sido duro por el encierro. “Intento mantenerme en forma como puedo. La parte positiva es que donde vivo tenemos libertad de movimientos, por lo que salgo a correr por las mañanas y por las tardes. Pero la realidad es que el virus nos ha cambiado las vidas y cualquier tipo de preparación está ahora mismo condicionada” inició.
La opción que tiene el corredor es la de su hogar, según refiere, corre por allí pero dentro de esto destacó sentirse afortunado, pues en otros sitios, como Nairobi, no se puede trabajar. “La realidad es que pensar en que el virus está te consume mucho en lo mental. La única opción es seguir las indicaciones del gobierno”, indicó.
UN DÍA CON KIPCHOGE
Las jornadas del atleta han cambiado pues se enfoca más al labor hogareño como bien se pudo notar en el llamativo video publicado en sus redes sociales. Se levanta temprano y tras el desayuno inician los ejercicios programados para el día.
POST BOLT
Desde la retirada de Usain Bolt el maratón se convirtió en la prueba reina del atletismo mundial. el keniata indica que el maratón es como la vida y permite participar a todo el mundo. “Siempre aconsejo que se debe correr como mínimo un maratón al año. Es una manera de realizarse. Es cuando sientes realmente la libertad”, dijo.
RIVALIDAD CON BUKELE
Kipchoge reconoce que la rivalidad se basa en lo que los aficionados quieren ver, especialmente desde que Bukele quedó a dos segundos del récord del keniata.
Kipchoge cree firmemente que es posible correr un maratón por debajo de las dos horas, pero no se ha encontrado a la persona que lo logre. “Estoy seguro que pasará dentro de poco”, afirmó, sin posicionarse como candidato.
Con 35 años, Eliud Kipchoge, sigue corriendo y aún no planea su retiro. “De momento sigo corriendo y me gusta ser una inspiración para mucha gente. Me encantaría dejarlo siendo un embajador del atletismo y viendo que el mundo corre, que hay 2.000 millones de personas que les gusta hacerlo como un estilo de vida”, finalizó.