Gregorio “Papo” Morales fue absuelto en el juicio oral y público, se le imputó por el intento de homicidio doloso en contra de su capataz de la estancia de su madre.
En pocas palabras, fue condenando por coacción grave y la medida judicial lo obliga a seguir tratamiento por adicciones a sustancias ilícitas. Por lo tanto, el Tribunal de Sentencia de la ciudad de Villarica no estuvo de acuerdo con los argumentos de la Fiscalía sobre la tentativa de homicidio, sólo lo sentenciaron por coacción grave en lugar a la pena mayor de 20 años.
Finalmente, la Fiscalía mencionó que apelará el fallo y pedirá la anulación del juicio a fin de iniciar una nueva causa.