Generalmente, al despertar lo primero que hacemos es prender el televisor y solo escuchar los programas matutinos, uno de ellos es “La mañana de cada día”, que supo consolidarse y ganarse su público, cumpliendo 30 años de emisión
Uno de los conductores es Carlos Troche, quien comenta que es un privilegio como periodista, conductor y como integrante de la familia del SNT, además de ser un gran compromiso.
“Esto significa que la gente apuesta por el trabajo que hacemos y obviamente esto hay que redoblar. Todos los días es un sacrificio, es un renunciamiento, mucha dedicación pero que vale la pena porque tenemos el reconocimiento de los televidentes”.
Destaca que uno de los factores que permitido que el programa siga vigente durante estas tres décadas fue el formato y la gente que fue formando parte del equipo.
“No es fácil estar en forma ininterrumpida 30 años y estar tan vigente, fueron distintas etapas del programa, varios formatos que fueron cambiando y ajustándose a lo que la gente requería. En su momento fue de entretenimiento, las cuestiones noticiosas eran importantes con los pocos recursos técnicos de aquella época”, menciona. “Hoy sigue siendo el mismo programa con un fuerte contenido periodístico que se desdobla y se convierte en un magazine donde tratamos de abarcar un público bastante importante y en distintos horarios”, resalta.
Troche remarca que “La mañana de cada día” se convirtió en una gran escuela para los que pasaron y trabajaron alguna vez por Canal 9.
“Yo venía de un formato muy rígido de noticiero y el programa me enseñó a potenciar y moldear un perfil distinto. ‘La mañana’ se va convertido en un formador de profesionales y para los televidentes en un compañero que no le abandona hace 30 años y se fue ajustando a los tiempos”, apunta Carlos.
Finalmente, asegura que hay todavía mucho de La mañana para rato.