India está pasando por una fuerte oleada de contagios y ya en el mes de marzo el gobierno de Narendra Modi había retenido la exportación de las vacunas contra el Covid-19, en respuesta a las fuertes críticas internas.
Ya para el 15 de abril finalmente las autoridades indias definieron establecer restricciones a la exportación de vacunas, priorizando la inmunización de su población para poder atenuar el fuerte golpe que la pandemia está provocando en el país.
Sin embargo, en medio de todos estos antecedentes, las autoridades nacionales tomaron la determinación de cerrar contratos y comprometer dinero por biológicos que no son seguros que puedan ser entregados en el menor tiempo posible, cuando también la oleada de contagio ha colapsado nuestro sistema sanitario.
Cuando ya a mediados de mes la situación preocupaba, el ministro de Relaciones Exteriores, Euclides Acevedo indicaba que Paraguay no recibió de manera oficial ninguna información de las restricciones de la exportación y que avanzaban en la compra de las 2 millones de dosis de Covaxin, producidas por el laboratorio Bharat Biotech.
“En el contrato, una vez perfeccionado y dependiendo de la logística de transporte, van a llegar entre 500.000 a 700.000 dosis en unos 15 días. El resto es especulación”, dijo en su momento el canciller nacional.
Sin embargo, el embajador indio concurrente en Paraguay, Dinesh Bhatia, ya advirtió en Palacio de López que la entrega de las dosis de Covaxin compradas dependerá de una aprobación del Gobierno de India, y no del laboratorio productor.
“Ellos (el laboratorio) van a preparar un cronograma, presentar a Paraguay y pedir permiso al Gobierno de la India. En este momento, no sabemos cuándo lo van a pedir y no han presentado el cronograma al Gobierno de Paraguay”, dijo Bhatia.
Es decir, una vez más Paraguay cierra contratos sin tener la certeza que recibirá las vacunas contra el Covid-19 de manera rápida, porque lo que hay es urgencia.
El mismo caso ocurrió con el lote de 1 millón de vacunas que se compraron del Fondo Ruso de Inversión Directa, de las que solo llegaron 24.000 dosis de Sputnik V, el primero que llegó en febrero fue de apenas 4.000 biológicos.
Y la situación para Paraguay se agrava aún más, pues el otro camino tomado para compra de vacunas fue el del Mecanismo Covax, liderado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). El inconveniente surge que el lunes la OMS confirmó que el Serum Institute of India (SII), que se encarga de la producción de más del 60% de las vacunas que se venden en todo el mundo, no podrá entregar las 90 millones de dosis.
El SII es un actor importante para Covax, y es uno de los principales proveedores biológicos, pero la distribución de las 90 millones de vacunas para abril y mayo está comprometida por las restricciones de exportación establecidas por India.
En medio de este escenario, el panorama para Paraguay pasó de ser esperanzador a incierto, pues las principales fuentes de provisión de vacunas contra el Covid-19 ahora están estancadas.
Acevedo indicó que la Cancillería maneja en estos momentos unas 97 propuestas de venta de vacunas. Advirtió, no obstante, que hay que manejar con atención cada propuesta y su viabilidad ya que hay muchos intermediarios y especulaciones dentro de las ofertas.
Sobre las compras ya hechas por el Gobierno, el canciller indicó que están las 1.000.000 de dosis compradas al Fondo Ruso de Inversión (vacunas Sputnik V), las 2.000.000 compradas al laboratorio Bharat Biotech de la India (vacunas Covaxin) y 1.000.000 de vacunas producidas en Emiratos Árabes Unidos (vacunas Sinopharm).
Respecto a la última compra, el canciller confirmó que el ministro de Salud, Julio Borba, firmó el contrato de compra con representantes de la empresa G42, que cuenta con licencia de producción de las vacunas Sinopharm, dijo en entrevista con el canal Telefuturo.
90 millones de vacunas planeaba distribuir la OMS entre abril y mayo, pero las restricciones de la India dejan en riesgo está operativa.
2 millones de dosis compró Paraguay al laboratorio hindú Bharat Biotech, pero las políticas restrictivas afectarían la entrega.