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Un país harto de los privilegios

Comentario 3×3

Por Benjamín Fernández Bogado

Una de las cuestiones más irritantes son los privilegios de algunos sectores de la sociedad paraguaya. Estos privilegios fueron los que llevaron a la Revolución Francesa, los ciudadanos de París se levantaron contra la nobleza. Hoy estamos viendo que Itaipú se vanagloria de haber reducido una flota de autobuses de 76 a 56 para hacer el traslado de sus empleados de CDE a Hernandarias, son 18 kilómetros y eso significa en términos de ahorro con 20 autobuses menos, US$ 1.8 millones.

La pregunta es por qué tendrían que tener autobuses los empleados mejor pagados del servicio público paraguayo, el que menos gana, gana G.25 millones mensuales, y hay salarios por encima de G. 140 millones al mes, cifra suficiente para tener su propio automóvil y desplazarse los 18Km.

Si fueran más inteligentes, dirían, si en total 20 significan US$ 1.8 millones, el dejar sin autobuses el sistema significa un ahorro por encima de los US$ 8 a 10 millones, seguimos hablando de personas privilegiadas, podría también el municipio de CDE o Hernandarias autorizar un servicio de transporte público que lleve a los sacrificados y bastante privilegiados empleados de Itaipú a sus lugares de empleo desde alguna parada hasta la boca de entrada a la represa.

El Paraguay está harto de los privilegios y privilegiados, a la gente le cuesta mucho sobrevivir y peor aún, sostener un estado grosero y escandaloso que sigue llenando de privilegios a un sector de su masa parasitaria de 350 mil empleados.

Equipo Periodistico
Equipo Periodistico
Equipo de Periodistas del Diario El Independiente. Expertos en Historias urbanas. Yeruti Salcedo, John Walter Ferrari, Víctor Ortiz.

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