El pasado 22 de abril falleció el fundador de la Asociación de Empresarios Cristianos (ADEC), José Antonio Bergues, mejor conocido como “Bebe”, a causa de un paro respiratorio. Para rendir un homenaje a quien fue su primer presidente, miembros de la ADEC lanzarán el próximo jueves 02 de diciembre el libro “El aprendiz incansable” a las 19:30 en Casa Texo, ubicada en la avenida Gral. Bernardino Caballero y Jordania.
La editora del texto, Narumi Akita, explicó que la idea de sacar un libro sobre Bebe surgió debido a que la ADEC deseaba realizar un tributo más allá de las misas y los eventos que ya estaban contemplados tras su partida.
“¿Y qué mejor manera de hacerlo que a través de un libro? porque representa de alguna manera, un elemento, una forma de comunicación que él tanto amaba. Bebe estaba rodeado de libros, los regalaba, le gustaba mucho registrar las cosas. Fue una persona muy admirada, amada y valorada”, afirmó.
Declaró que deseaban lanzarlo en este mes, en el marco de los 40 años de la ADEC y que sea un compendio de testimonios, anécdotas y experiencias escritas por familiares, amigos, colegas y compañeros de él, que puedan de alguna manera encapsular su vivencia con Bebe y enmarcar la esencia de él. “Es un libro un poco atípico, no sería una biografía precisamente”, mencionó.
Reveló que el libro tiene muchos giros y enfoques, por lo que ella se encargó organizar el hilo conductor de los escritos y a partir de allí propuso que este sea la del “Aprendiz incansable”, dado que esta fue una característica que marcó a Bebe. “La superación constante, las ganas de aprender y de que otros también se empoderen aprendiendo”, sostuvo.
Comentó que una vez decidido esto, armaron un comité editor, empezaron a invitar a colaboradores a escribir y a ellos les dieron unas preguntas orientadoras. Luego, Narumi editó todo el material, dividió el libro en apartados y le dio consistencia. “El resultado fue mucho mejor de lo que al principio esperábamos”, aseveró.
Resaltó que con este libro se podrá notar que el fundamento de Bergues, antes que nada, empezó por casa.
“Fue muy coherente, con sus valores y principios. Un hombre de familia, un empresario descripto por todos los que colaboramos en el libro como alguien ejemplar, íntegro, con un genuino compromiso hacia la calidad de vida con sus colaboradores”, expresó.
Igualmente, manifestó que fue fundador de iniciativas de organizaciones de la sociedad civil, que supo darles vida a tantas ideas y que, a la vez, supo soltar y preparar a su entorno.
“La ADEC cumple 40 años, sigue fuerte e influyente. Eso también es fruto de su trabajo, porque supo dar origen, pero al mismo tiempo preparó al entorno para que continúe. Además, también tenía esa característica de ser aprendiz, nunca tuvo mentalidad de jubilado. A sus 86 años, tenia una sed y ganas de aprender como si fuese una persona que recién está expuesta a nuevos conocimientos”, sentenció.
Determinó que Bebe contagiaba eso y que él mismo no perdía la oportunidad de agregar valor a las personas a través de pequeños y grandes gestos. “Algo que se resalta mucho de él es que no lo hacía ni por reconocimiento ni para caerle bien a la gente, lo hacía genuinamente porque él creía que su misión en la tierra era la de servir a los demás, fue un hombre muy inspirador”, detalló.
Finalizó aseverando que, por estos motivos, cuando él falleció, creó mucha conmoción en el entorno y que tuvo una vida demasiado abundante, con demasiadas facetas, por lo que quisieron reflejar en el libro cómo impactó en todas las esferas en las que se movió.
“Nos dejó un legado único, extraordinario diría yo. Personas como Bebe son muy difíciles de conocer”, concluyó.
