Para frenar inseguridad, Italia penaría con cárcel a padres que no mandan hijos a la escuela
El Consejo de Ministros italiano analiza la posibilidad de penar con hasta dos años de prisión a los padres que no envíen a sus hijos a la escolarización obligatoria, dentro de un paquete de medidas para frenar la criminalidad juvenil que incluyen también la prohibición de uso de teléfonos celulares a menores a partir de 14 años que hayan sido condenados.
«Quien, investido de autoridad o encargado de la tutela de un menor, no imparta o haga impartir la enseñanza obligatoria, sin justa causa, será castigado con pena de prisión de hasta dos años», establece uno de los 14 artículos del denominado decreto-ley con «medidas urgentes para combatir el malestar juvenil, la pobreza educativa y la delincuencia juvenil» que el Gobierno trata hoy.
El borrador del decreto, anticipado por los diari...