Radio Libre celebra hoy 25 años de vida institucional, construyendo, desde la palabra, un espacio democrático. Referentes de la cultura nacional e internacional, desde Augusto Roa Bastos hasta Rubén Bareiro Saguier han dejado entrevistas largas y enriquecedoras a lo largo de estos años.
¿Por qué decidió abrir la radio?
La democracia llevaba 8 años en medio de intentos de retorno al modelo autoritario, una falta de claridad de conceptos, un confusión que caía en el libertinaje y en un final de siglo que iba hacia un modelo globalizador del que no comprendíamos muy bien su sentido pero estábamos siendo arrastrados por su lógica. Dijimos: vamos a aportar desde la Radio un nuevo lenguaje, sin agravios ni insultos, nada que acabe siendo el estercolero de nadie. Dijimos: levantemos el listón y abramos las ventanas al mundo con acuerdos con 7 emisoras internacionales. Llegamos a transmitir en inglés y francés. Queríamos dejar el testimonio que una radio que se abrace a la cultura podría ayudar a que la democracia tuviera sentido y la libertad un valor trascendente. Eso fue lo que nos motivó a abrir la radio en septiembre de 1997.
¿Cuál era el objetivo?
Abrirnos a una nueva manera de entendernos. En diversidad pero buscando en el diálogo el consenso que enriquece y nos fortalece en el otro. Entendíamos que sin experiencia democrática la comprensión de la comunicación como un factor dinámico ayudaría al país a lograr sus propósitos. Identificando los problemas y ayudando a resolverlos. La lógica de Dewey de que comunidad más comunicaciòn era igual a democracia lo llevamos a la práctica. No renunciamos en ese proceso al fortalecimiento de nuestra propia identidad. Nunca dejamos de tener programas en guaraní y difundir ampliamente la música nuestra. Quizás interpelados por nuestra raíz cristiana que en la parábola de los talentos decía que al final de los tiempos nos preguntarían que habíamos hecho con las virtudes que nos dieron, quisimos demostrar que una Radio respetuosa de la palabra, que creyera y respetara las ideas de los demás y al mismo tiempo reforzara nuestra identidad nacional era posible. Muchos no nos daban más que unos meses de vida pero estamos cumpliendo un cuarto de siglo lo que nos parece un gran éxito del modelo.
¿Cómo inició Radio Libre y cómo se encuentra hoy?
Desde la revalorización de la palabra mostramos que una radio distinta era posible y que el Paraguay estaba listo para una opción de ese tipo. Un medio de comunicación se debe a una idea y a una comunidad que comparta la oferta que se ofrece. Una cosa no va sin la otra. Construir audiencia es el resultado de un cúmulo de virtudes. Confiabilidad, compromiso y responsabilidad hacen parte de las cosas compartidas que permiten que una audiencia crezca y se fortalezca. Hemos creado consejos de oyentes, promocionado concursos literarios en él paìs y en el mundo, becado a jóvenes talentos de las universidades, transmitido en directo eventos culturales y vivido desde la comunidad el sueño de un país democrático en libertad. Los japoneses dicen que una empresa se recibe de tal luego de 20 años. Eso nos pasa a nosotros en este primer cuarto de siglo. Nos sentimos correspondidos por la audiencia y patrocinadores en el tipo de emisora que hemos construido entre todos.
¿El objetivo sigue siendo el mismo que 25 años atrás?
Si y algo más. Buscar entusiasmar a las audiencias jóvenes que recuperen el verbo, la palabra como factor que nos permite entendernos y construir espacios comunes. Hay nuevos retos con las tecnologías disponibles. No estamos solos y surgen nuevos actores. Pero la radio en Paraguay sigue vive a pesar de todo, quizás porque en la misma esencia humana la palabra define nuestra condición de seres vivientes. El ámbito radial requiere actualizar su oferta siempre y demanda capacidad de quienes están frente a un micrófono para construir audiencias que se preocupen y se ocupen de los grandes temas nacionales. Las radioemisoras de amplitud modulada en ese sentido están muy vivas y presentes como la urgencia del mismo verbo.
Haciendo una retrospectiva, ¿Cómo ve a la radio 25 años después?
Más entusiasmada por un lado y más agitada por el otro. Escucho mucha gente joven interesada en colocar mensajes que motiven pero al mismo tiempo muy preocupados por el retorno de las audiencias a través de las redes sociales. Son como los enamorados recientes que esperan que la magia no se rompa pero acaban consiguiendo lo opuesto. Creo que en la comunicación radial hay mucho de magia, hechizo, conocimiento y compromiso. Esa es la alquimia que genera audiencias. Describir la realidad solo con la palabra es un tremendo reto para los radialistas de todo el mundo. Ese sentido de radio en este cuarto de siglo de Libre es de un frenesí enorme, un desencanto muy temprano y la urgente necesidad de adocenar los tiempos y las realidades.
¿Alguna anécdota que recuerde?
Muchas y me animaría a decir que ocurren todos los días algo que ingresa como condimento de la liturgia hablada como cuando un comunicador primerizo presentó a un conocido cantante llamado Juan B. Mora como Juan Buey Mora!. Cuando le dije de dónde sacó eso me dijo que un amigo le pasó el dato que eso significaba la B porque había estado envuelto en un caso de abigeato. Un papelón enorme.
¿Cuál es el rol de Radio Libre en pos de la democracia del Paraguay?
Hemos ayudado a pasar de la condición de idiotas a la de ciudadanos. Este año antes de los comicios internos de diciembre y en la antesala de las elecciones nacionales del 2023 hemos denominado todo este tiempo como: «año de la ciudadanía» donde enfatizamos el trascendente rol de los mandantes sobre los mandatarios. El gobierno se parece al pueblo que lo elige. Si no aprendemos a votar, controlar y denunciar seguiremos con una democracia de baja intensidad que se agota en la liturgia del voto pero carece de evangelio.
¿Algún mensaje que desee compartir con nuestros lectores?
Que estamos sorprendidos por el éxito de Radio Libre como idea primero y como propuesta desarrollada después. Hemos probado que el Paraguay merece una emisora como la nuestra, que puede disfrutar de ella y enriquecerse en sus programas diarios. Somos una voz que surgió de la oscuridad para alumbrar un destino.