jueves, abril 18, 2024
17.2 C
Asunción
InicioSin categoríaNavidad desde otra perspectiva

Navidad desde otra perspectiva

Categoría

Fecha

Felipe Domínguez / Patricia Galeano

 

No existen da­tos exactos de cuántos para­guayos están residiendo en el exterior, pero hay aproximacio­nes de que un millón y medio de compatriotas viven afuera. Entre los 2000 y 2005, debido a la difícil situación miles de connacionales tuvieron que emigrar a principal­mente Argentina, España y Estados Unidos, pero existen más destinos a los que terminan rehaciendo sus vidas.

A continuación conoce­remos cómo los paragua­yos pasan las fiestas en el mundo.

No existen da­tos exactos de cuántos para­guayos están residiendo en el exterior, pero hay aproximacio­nes de que un millón y medio de compatriotas viven afuera. Entre los 2000 y 2005, debido a la difícil situación miles de connacionales tuvieron que emigrar a principal­mente Argentina, España y Estados Unidos, pero existen más destinos a los que terminan rehaciendo sus vidas.

A continuación conoce­remos cómo los paragua­yos pasan las fiestas en el mundo.

 

 

La Navidad no es diferente 

Dalma Uliam­bre vive en Italia hace 8 meses aproxi­madamente, ella ya vi­vió unos años junto con su madre pero volvió a Paraguay unos años a es­tudiar psicología. Luego decidió volver a Europa en búsqueda de un me­jor futuro y calidad de vida. Actualmente vive en Como, una ciudad italiana ubicada al norte donde reside su madre y tíos.

No es su primera Navi­dad fuera de Paraguay, ya es la tercera vez si no se equivoca en el cálculo, señaló entre risas. La Na­vidad y año nuevo pasa con su mamá y tíos y justo este año más fami­liares suyos irán a Italia para las fiestas.

Al ser consultada sobre las diferencias de las fies­tas a comparación de Pa­raguay, Uliambre indicó que en general no es tan diferente pero no es la misma sensación.

Primeramente por el cli­ma, ya que es invierno en esa para del mundo. “También en Paraguay siento que en las fiestas hay demasiada prepara­ción, ropa nueva, todo nuevo, deudas de aquí y allá, acá no”, explicó. Añadió además que ahí también es una costum­bre las cenas en familia y se hacen los intercam­bios de regalos.

Si extraña a los familia­res y amigos que tiene en Paraguay refirió que en el día a día no tanto con las ocupaciones que tie­ne. “Pero en las fiestas sí, uno siente más la falta de sus familiares y amigos”, rescató.

 

En búsqueda de conocer nuevas culturas

Héctor Vera se encuentra en Rusia desde hace tres años y dos meses, el mismo comen­tó que siempre busca pasar las fiestas en distintos lugares y conocer otras culturas para así tener otro punto de vista social y visualizar el desarrollo de los países de primer mundo.

Vera relató que las fiestas son diferen­tes en Rusia ya que sus costumbres son distintas, ellos se rigen por el calenda­rio Juliano y los festejos son del uno al nueve de enero, pero la comunidad paraguaya que corresponde a un gru­po de estudiantes  se reunirá en las fechas del 24 y 31 para cenar y luego continuar con sus actividades ya que los estudiantes se encuentran en el cierre del semestre y esa actividad es su priori­dad central.

Además, resaltó las inmensas activida­des que se realizan en el país ruso ya que las ciudades se decoran completa­mente y ofrecen distintos atractivos para disfrutar en esas fechas. “Cabe des­tacar que en los rusos valoran mucho el arte entonces ofrecen varios aconte­cimientos sin importar las bajas tem­peraturas”, explicó.

Héctor indicó que extraña mucho a su familia pero se aferra al hecho de aventurarse y seguir con su camino del estudio. “Salir de mi zona de confort abrió más mi mente y me ayudó a se­guir formándome porque siempre soñé con aportar mi granito de arena en el desarrollo cultural y social”, finalizó.

 

 

La alegría que se siente en Paraguay

Erlina Domín­guez reside en España hace 15 años en búsque­da de mejores horizontes, la misma relata que hace 13 años pasa las fiestas en Madrid y solo tuvo dos oportunidades de pasarla aquí desde que reside en el país europeo.

Como todos los años pa­sará Navidad con toda familia ya que su esposo, hijas y hermanas tam­bién se encuentran en la madre patria. Para Domín­guez no existen muchas diferencias con relación a la celebración navideña ya que lo pasa en familia. En la noche buena preparan la cena todos reunidos y se siente un ambiente cá­lido así como nuestro país, pero añora esa alegría que se percibe en todo el terri­torio guaraní. “Es impre­sionante cuando llegan las fiestas la alegría inmensa que se siente”, expresó con relación a pasar las fiestas en Paraguay.

Por otra parte, la entre­vistada cuenta que extra­ña mucho su país pero muchas veces no puede tomar la decisión de vol­ver ya que es el sostén de su familia y está pe­leando para obtener un mejor futuro económico. “Yo creo que la mayoría desea volver a Paraguay, la mayoría estamos lu­chando para poder volver con una mejor econo­mía”, añadió.

 

 

 

Recuerda a sus familiares con añoranza

Hugo Martí­nez, nació en la Cruz Roja en Paraguay, con once hermanos fue criado en Fernando de la Mora. Sin embargo, pasó más tiempo de su vida en Argentina. Hace 25 años está radicado en Quil­mes, provincia de Buenos Aires.

Pasó 23 Navidades en Ar­gentina y unas dos en Pa­raguay desde que emigró al país vecino. Martínez explicó que la Navidad es muy diferente en la ciudad Argentina, tiene muy bellos recuerdos de su infancia aquí en Para­guay. Añadió que donde actualmente vive ni si­quiera se conocen entre vecinos y a solo suma se ven unas cinco o seis ve­ces en el año.

“Quizás en Navidad y año nuevo nos vemos en la vereda y nos movemos la mano desde lejos como un saludo lejano, es más un formalismo el desear­le una feliz Navidad” re­firió.

También sostuvo que hay ambiente de todo menos de Navidad y la celebra­ción del nacimiento de Jesucristo. “La gente está con otro espíritu en el sentido profundo de la razón de esta fecha, el va­lor ha perdido vigencia”, indicó.

A la pregunta de si ex­traña a los familiares en Paraguay afirmó que extraña a sus hermanos y primos pero no tiene la mente puesta en Pa­raguay porque ya tiene una familia formada con ocho hijos y una nieta. “En las fiestas la melanco­lía recorre la cabeza pero no los extraño con triste­za, más bien con añoran­za”, puntualizó.

 

 

Primera Navidad lejos de Paraguay

Martín Cogliolo cumple tres meses el próximo 3 de ene­ro. Es la primera vez que pasa las fiestas fuera y lejos de Paraguay. Al ser consultado sobre cómo pasará estas fiestas explicó que el 24 se realizará una cena con otros com­patriotas que se encuentran viviendo en Moscú.

Como fue a Rusia a estudiar, Cogliolo refirió que no pueden hacer grandes fes­tejos porque todos tienen clases en la uni­versidad hasta el 25 de diciembre. “Aquí no festejan la Navidad en la misma fecha que la festejamos nosotros. Los rusos fes­tejan la Navidad el 7 de enero y es por eso que el 24 y 25 son dos días comunes y co­rrientes acá”, explicó Cogliolo.

Si existen diferencias en cuanto a los fes­tejos, Martín indicó que como en todos lados se vive y siente mucho la Navidad, quizás no espiritualmente pero los par­ques y calles están llenas de árboles y lu­ces navideñas por toda la ciudad.

Cogliolo sostuvo que a pesar que la colec­tividad paraguaya en Moscú es reconoci­da por su unidad igual se extraña mucho la tiera guaraní. “Nuestras costumbres, comida, clima, los primeros días están siendo un poco difíciles pero con el apo­yo de la colectivdad realmente se vuelve todo más fácil” añadió.

Hasta el 23 de diciembre unas 15.631per­sonas del aeropuerto Silvio Pettirossi, y otras 20.438 entraron, comentó Favio Es­pinoza, director general de Migraciones. Y se espera que arriben más personas des­de la otra semana y en el mes de enero.

En cada rincón la Navidad tiene su propia tradición, las ciudades se llenan de luces y árboles representativos pero el ambiente nunca es el mismo y aunque hayan pasa­do años, no hay paraguayo que añore su tierra.

Equipo Periodistico
Equipo Periodistico
Equipo de Periodistas del Diario El Independiente. Expertos en Historias urbanas. Yeruti Salcedo, John Walter Ferrari, Víctor Ortiz.