Una audiencia pública donde fue tema de debate el proyecto de ley “Que modifica los artículos 8, 11, 13, 21, 22 y 23 de la Ley N° 1.016/1997 – Que establece el régimen jurídico para la explotación de los juegos de suerte o de azar”, fue organizada en la mañana de este jueves, en la Cámara de Diputados, por la Comisión de Legislación y Codificación.
Dicho estamento asesor tiene como presidente al legislador Jorge Ávalos Mariño (PLRA-Paraguarí); mientras que la iniciativa en cuestión responde a la autoría del diputado Adrián Vaesken (PLRA-Central).
El evento contó con participación de representantes del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF); la Abogacía del Tesoro; y referentes de varios sectores de la sociedad civil.
Empresarios del rubro, incluso de distintos países de América Latina, también participaron de la audiencia de manera telemática, con el objetivo de realizar una legislación comparada y analizar soluciones que ofrecen los diversos ordenamientos jurídicos de la región, sobre el tema.
LA PROPUESTA
El legislador proyectista, Adrián Vaesken, explicó que la propuesta busca dar fin al monopolio en los juegos de azar.
Señaló que Paraguay es uno de los pocos países que no cuenta con una normativa contra el monopolio en dicho ámbito.
Seguidamente, abogó por la formalización del mercado mediante esta iniciativa, con la finalidad de que se terminen los juegos ilegales y se genere oportunidades laborales para todos los paraguayos.
“Urge la modificación de la carta orgánica de la Comisión Nacional de Juegos de Azar. Hay que tener apertura y hacer que el libre mercado fluya; que se fomente la competencia y que eso genere más ingresos para el Estado paraguayo”, dijo el parlamentario.
RÉGIMEN
Cabe resaltar que una modificación significativa es la que se busca introducir en el artículo 8° de la actual ley N° 1.016/1997 – “Que establece el régimen jurídico para la explotación de los juegos de suerte o de azar”.
La misma establece que las concesiones serán otorgadas a los tres mejores oferentes de las licitaciones; y ya no solo a una empresa, como es en la actualidad, donde la concesionada, solamente, es la mejor oferta.