Dario Messer, el “doleiro dos doleiros”, confirmó en su delación premiada que el expresidente Horacio Cartes financió su fuga y lo apoyó para que siguiera prófugo de la justicia brasileña.
Así lo confirmó la prensa brasileña, esto luego de que el Tribunal Federal de Río de Janeiro ratificó un acuerdo de negociación de culpabilidad con Dario Messer, requerido también por la justicia paraguaya, quien se comprometió a devolver 1.000 millones de reales que al tipo de cambios actual representa unos US$ 183 millones, a las arcas públicas y cumpliría una condena de 18 años y 9 meses.
El hoy preso en el vecino país, acordó devolver el 99% de sus bienes valuados en unos US$ 183 millones. La justicia paraguaya debe hacerse con parte de los recursos porque gran parte de los hechos punibles fueron cometidos en territorio nacional.
Según lo que explicó el ministro de la Secretaría Nacional Anticorrupción (Senac), René Fernández, la justicia paraguaya deberá negociar con el Brasil sobre el porcentaje de dichos bienes. Sin embargo, aclaró que primeramente debe concluirse el juicio a nivel local.
El 2º y 7º Juzgado Penal Federal de Río aprobaron el acuerdo, según la evaluación del grupo de trabajo Lava Jato en el estado de Río de Janeiro. El Ministerio Público detalló que en el caso de Lava Jato ya se tomaron las declaraciones adjuntas a los archivos del caso, asociadas con tres investigaciones que involucran a Messer.
Entre ellas se encuentra el Cambio, A pago, se trata de un esquema de lavado de dinero en Uruguay, que habría movido US$ 1.600 millones. En segundo lugar se encuentra la investigación Marakata, que trata sobre transacciones en dólares para lavar dinero en el contrabando de esmeraldas.
Por último se encuentra la operación Patrón, sobre una organización trasnacional de blanqueo de capitales en Paraguay, que habría sido liderada por Messer y que también involucra a empresarios locales, entre ellos al expresidente de la República Horacio Cartes, quien es muy cercano al cambista.
“A nivel local existe un proceso penal en donde él se encuentra imputado y con una orden de captura internacional, los bienes están siendo administrados por la Senabico. Esas medidas cautelares han sido dictadas a pedido del Ministerio Público, con la finalidad del comiso especial, que implica que el Estado paraguayo de usos a esos bienes mientras continúa el juicio”, explicó en contacto con nuestro medio el titular de la Senac.
“La justicia brasileña se debería sentar en una mesa de negociación sobre el destino de los bienes que hoy están siendo administrados por Paraguay. Se tiene que construir un acuerdo bilateral entre Paraguay y Brasil, atendiendo a todas las circunstancias de los hechos que son investigados. Es lo que recomiendan las mejores prácticas internacionales sobre todo cuando existe una norma legal o un instrumento internacional que expresamente haya sido firmado entre los países involucrados”, agregó en otro momento Fernández.
Sobre ese punto mencionó que las buenas prácticas intencionales señalan que los países se reparten los bienes comisados.
Según el diario Folha, Messer deberá devolver más del 99% de sus activos, que incluye propiedades y valores de alta gama en Brasil y en el exterior, además de obras de arte y patrimonio. En Paraguay, tiene bienes vinculados con actividades agrícolas e inmobiliarias. Se estima además que había creado más de 3.000 sociedades offshore.
El hermano del alma
El juzgado de Brasil, semanas atrás solicitó al Ministerio Público paraguayo que notifique a un total de ocho paraguayos vinculados al caso “Lava Jato” para que se presenten a una declaración indagatoria. El caso nuevamente salpica a grandes nombres de la política y el empresariado local.
Entre la lista de personas se destaca Horacio Cartes, expresidente de la República. Esto debido a las serias sospechas de que el exmandatario financió la estadía de Darío Messer en el país mientras este era prófugo de la justicia brasileña.
La justicia del vecino país está absolutamente convencida de la responsabilidad de Horacio Cartes y de varios de sus amigos en el caso “Lava Jato”. Brasil había solicitado que declare una serie de preguntas que le hace la Unidad Investigadora Brasileña de Río de Janeiro en torno a su relación con el hermano del alma detenido en Brasil, Dario Messer, y la conexión con el lavado de dinero y el crimen trasnacional.
