¿Se muerde la cola? ¿Da mil vueltas ? Estos y otros comportamientos que a los humanos nos resultan muy extraños tienen sus motivos.
Los perros, al igual que los gatos, hacen a menudo cosas que a los humanos nos resultan extrañas. Sin embargo, no son conductas locas, todas tienen una serie de explicaciones bastante lógicas que los etólogos e investigadores del comportamiento canino se han encargado de estudiar y compartir.
Una buena parte de los comportamientos que solemos catalogar de raros como dar mil vueltas antes de echarse en el suelo, rascar la tierra tras hacer sus necesidades o enterrar objetos responden a los puros instintos, a la poderosa herencia del lobo.
Otras conductas extrañas pueden esconder dolor o malestar, por lo que hay prestarles mucha atención. ¿Cuántas veces has visto al perro arrastrarse sentado por el suelo? Muchas, ¿verdad? Pues debes saber que si el peludo hace esto, puede que tenga lombrices intestinales o que no por alguna razón no pueda descargar las glándulas anales. Cuando los perros se muerden la cola, también pueden estar sintiendo dolor. La solución ya la conoces: ¡al veterinario!
Al igual que nos sucede a las personas, los canes pueden experimentar conductas de tipo compulsivo a las que deberemos prestar especial atención. Que no cunda el pánico porque las vas a detectar con facilidad. Es normal que un perro se persiga la cola pero será anormal si está todo el rato haciéndolo. En este caso en concreto, una investigación realizada por la Universidad de Helsinkiy encontró ciertas similitudes con el TOC (Trastorno Obsesivo Compulsivo) de las personas. Igualmente, quédate tranquilo si la mascota da unas cuantas vueltas antes de dormir, preocúpate si ha entrado en bucle. De nuevo, si observas comportamientos compulsivos en él como tratar de cazar las luces y sombras, quedarse como congelado o cubrir de forma repetida su comida deberás llevarlo al especialista.