Los mal llamados sin tierras en connivencia con políticos oportunistas ocuparon ilegalmente varias propiedades en Puerto Casado, Alto Paraguay, administradas por la empresa Victoria SA y se encuentran en litigio.
Son parte de las 300 mil hectáreas que se disputan en la Justicia y, de acuerdo con los denunciantes, están siendo invadidas como una maniobra orquestada en la clandestinidad por políticos inescrupulosos, orientados presumiblemente por miembros de la Asociación del Espíritu Santo para la Unificación del Cristianismo Mundial (AES), más conocida como Secta Moon.
“La empresa Victoria SA viene desarrollando estas propiedades por contrato con la Secta Moon. Pero como existe una medida cautelar de no innovar sobre los inmuebles a favor de la firma Victoria, la AES recurre a esta nueva artimaña de despojo coludidos con famosos políticos”, explicó el abogado Diosnel Sosa.
Se lleva adelante una temerosa campaña de desinformación y la alianza con políticos oportunistas le valieron a la Secta Moon para incumplir la medida y generar inestabilidad en la zona.
Sindican a la Comisión Pro Tierra de Puerto Casado, dirigida por el ex intendente Raúl Lagraña -con varios antecedentes- de estar detrás de estas invasiones, y al propio gobernador José Domingo “Mino” Adorno, investigado por numerosas irregularidades en su administración.
Curiosamente el ex juez de Puerto Casado, Domingo Vera, quien había sido destituido por el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados en marzo de 2019 por mal desempeño de funciones, representa a los invasores en varios procesos, sus lazos con el gobernador y la comisión pro tierra son vox populi.
El abogado reiteró que la firma Victoria SA, con grandes inversiones en el país, viene siendo víctima del sistema judicial y de la corrupción de algunos referentes en el gobierno.
Así demuestran, por ejemplo, audios filtrados de conversaciones entre el ex secretario del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados, Raúl Fernández Lippmann y el abogado de la Secta Moon, Carmelo Caballero, donde “cocinaban” imputaciones; o la inexplicable perseverancia del destituido presidente del Indert, Mario Vega, por intentar despojar a la empresa de las tierras, con una declaratoria de colonización de hecho traída de los pelos.
Desde la empresa emitieron un comunicado donde manifiestan que todavía confían en las autoridades y esperan una resolución del conflicto que lleva bastante tiempo en la justicia.
“Existe una invasión en una parte donde tenemos una reserva con unos bosques, consideramos que la verdadera intención de ellos es robar madera”, sostuvo por su parte el presidente de Victoria SA, Diego Puente.
Recordemos que un incidente que nació de esta forma ocurrió en año 2012 en el que fueron sacrificadas 17 personas y que derivó en la destitución del presidente Fernando Lugo, conocida como «masacre de Curuguaty».
ANTECEDENTES
El representante legal sostuvo que la Secta Moon tiene una deuda de US$ 15 millones asumida en el año 1998 con la firma Victoria SA, que hoy se niega a reconocer.
Esta operación de préstamo es real, existen extractos bancarios que demuestran el envío efectivo del dinero. Así como constancias contables y varias notas firmadas por los representantes de la AES en el año 2000, que evidencian la recepción del dinero en calidad de préstamo.
La Asociación del Espíritu Santo, en asamblea, decidió pagar la deuda a los acreedores, transfiriendo las tierras adquiridas por dación de pago. En el 2009, la Junta de Directores de la AES otorgó poderes especiales por escritura pública para la transferencia de los inmuebles.
En el 2012, el Grupo Cusabo adquiere los derechos de la deuda de la AES, que se niega a firmar las escrituras públicas de transferencia.