En la jornada, ejecutivos y dueños de las franquicias NBA se juntarán con la liga para determinar qué acciones tomarán sobre el coronavirus, la epidemia que se expandiendo por EE.UU. con nula respuesta oficial. La decisión de jugar partidos a puertas cerradas y con el personal indispensable parece casi un hecho y pese a la oposición de LeBron James, podría definirse este mismo miércoles.
Pero en medio de todo esto, la NBA está entrando en su mes final de temporada regular y dentro de las muchas cosas que quedan por definirse, la entrada a los playoffs es una de las más importantes. Si los partidos pasan a jugarse a puertas cerradas, el cambio de ambiente y de condición podría dar vuelta varios duelos individuales.
Dentro de los equipos que aparecen luchando por una plaza, los New Orleans Pelicans y los Memphis Grizzlies aparecen como los menos afectados, ya que los primeros tienen el peor récord como locales dentro de los que compiten en el Oeste y los segundos son de los equipos que menos gente lleva a su estadio cuando juegan en casa.
Además, Philadelphia 76ers podría verse muy mal ya que son el mejor equipo de la liga como locales (28-2) pero sin su público, son de los peores visitantes de la liga y jugar a puertas cerradas sin el ambiente del Wells Fargo Center podría ser muy dañino para sus chances de asegurar la ventaja de campo en la postemporada.
Justamente la ventaja de campo podría pasar a ser insignificante si la liga decide jugar todos los partidos a puertas cerradas, ya que el público no podrá ser un factor para apoyar al equipo e incluso para condicionar al arbitraje, como suele pasar en playoffs. Más allá de las medidas sanitarias necesarias para contener al virus, la NBA podría experimentar muchos cambios si se decide jugar sin público.