A inicios de agosto del año pasado, el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), inició los trabajos del cruce Tres Bocas. Se trata de un paso de túnel y una rotonda. Desde entonces, comenzó el suplicio de más de 70 familias de la zona que se ven afectadas ante cada temporal. Sin una solución verdadera por parte del ministerio o de la firma proveedora.
Las precipitaciones registradas en la noche del martes, fueron las más importantes desde que iniciaron los trabajos.
María Lea Melgarejo de López, presidenta de la Asociación de Frentistas de la zona de Tres Bocas, afirmó que, desde agosto, cuando comenzaron los trabajos, padecen por las inclemencias del tiempo, y resaltó que las últimas lluvias registradas fueron las peores.
“El raudal entró en las casas de todos los frentistas. Especialmente en los ubicados sobre la avenida Avelino Martínez. Unos cuantos sobre Acceso Sur en frente a la Comisaría de Arroyo Seco. Están rebosando todos los canales que abrieron para hacer los muros. Se queda como un canal y por ahí corre el agua como un río”, explicó.
Tecnoedil es la empresa que lleva adelante los trabajos. En las casas entra el barro que deja el raudal. La firma proveedora suele asistir a las familias retirando en camiones todo el barro, pero ahora, ante la mayor envergadura del incidente, las familias se encuentran en una incertidumbre.
“Después de esto no se cómo quedará esa gente. Están a punto de caerse todas sus casas. El asfalto de la avenida Avelino Martínez por bloque se va desprendiendo. Estamos muy mal. Ellos no previeron. Debieron hacer un canal o una canaleta”, expresó.
GONZÁLEZ
Ricardo González, frentista, afirmó que es una pena que estén pendientes de raudales para ir o no a trabajar.
“Debemos lidiar con el agua por culpa de inoperantes obreros e ingenieros civiles que no saben manejar una obra tan sencilla. Somos varias casas afectadas. Hay algunas que se derrumbaron y duele, por culpa de inoperantes”, manifestó.
AMARILLA
Ángel Amarilla, frentista y presidente del Asentamiento 9 de marzo, expresó que ya hicieron muchos reclamos y que el MOPC responde enviando obreros en algunos casos para retirar la arena que ingresa en las residencias.
“Si no vienen debemos pagar. Se trata de G. 80 mil a G. 100 mil por residencia. En algunas casas el agua ingresa adentro. Estos obreros cobran muy poco porque se trata de trabajos muy pesados”, explicó.
SIN RESPUESTAS
Melgarejo señaló que desde el MOPC siempre responden que acudirán para verificar las obras y que se va a arreglar, pero el encargado de las obras, el verdadero responsable, no responde mensajes ni llamadas.
Intentamos comunicarnos con el Ing. Alfredo Bordón, encargado de las obras. Sin embargo, señaló que no es el vocero autorizado. Nos pidió hablar con el Viceministro de Obras o con el director de vialidad de la cartera. De estos dos últimos no tuvimos respuestas hasta el cierre de la edición.
