El reciente video de la influencer de moda Nara Mieres, denunciando públicamente a su ex padrastro, el juez Héctor Capurro, se ha convertido en un grito de cientos de ciudadanos del país hartos del abuso de poder que día a día se vive.
En la denuncia, Mieres habla de una persecución a su madre y su familia de parte de dicho magistrado y la decisión de hacerlo público fue el desencadenante de 4 años de injusticia.
“Se encaprichó locamente en separar a mi hermano de nosotras y usó sus influencias para fraguar y conseguir estudios psicológicos falsos diciendo que mi mamá estaba loca y que mi hermano tenía más afinidad con la familia paterna, además de que recibía abusos en mi casa”, comentó la influencer.
Agregó que el juez le tuvo encerrada a la niñera y cuando esta pudo escaparse les contó lo que estaba pasando. “No entendíamos por qué esa obsesión y el querer lastimarle a mi hermano que tenía 4 años en aquel tiempo. Mi hermano tenía miedo no entendía qué estaba pasando. Siempre mi mamá y yo dimos la cara solas ante toda esta injusticia. Mi mamá tiene mucho coraje para plantarse ante este señor que maneja y manipula todo a su antojo”, mencionó.
Continuó diciendo que Paraguay es el país del amiguismo, “Haceme este favor y te pago con otro favor” y le humillaron a su mamá, le pisotearon en el Poder Judicial y le hicieron quedar como una loca. Un mes entero fueron separadas del pequeño.
Gracias a la prensa, amigos y abogados pudieron recuperarlo, y acordaron un régimen de visita, hasta que el niño le suplicó que no quería ir porque temía no volver a ver a su mamá.
Su madre (Karina Mieres) llamó al exesposo para saber qué estaba pasando y este se apareció acompañado de sus dos hijos y un policía armado para ingresar a la fuerza a su casa. Le amenazó con que no pararía hasta verle fundida, ya que tenía al Poder Judicial a su favor.
Karina relató que hizo una denuncia y su expediente está dormido. “Pensé que podía haber en la justicia terrenal algo de luz, pero no fue así, solo malos tratos en los juzgados de la Niñez y la Adolescencia a cargo de la jueza Graciela Rolón, se hace manifiesto el favoritismo a ese juez. Mi hijo es retirado cada dos días y fines de semana alternado por una asistente que jamás hizo contar la negativa de retirarse”.
POR LA FUERZA
En diciembre de 2019, la mamá de la influencer pidió a sus abogados dejar de lado los juicios para acceder al lado humano de este hombre y llegar a un acuerdo de paz, lo único que sirvió para dar pie a una imputación por el mismo hecho que había denunciado, alegando un informe psicológico por el pinchazo que la señora le dio la noche en que se metió a su casa a la fuerza con los policías.
“Mi mamá no buscó nunca conflicto, no le reclama ni que la prestación no cubre un cuarto de los tratamientos de mi hermano porque obviamente no quedó bien por lo que vivió desde los 4 años, el diagnostico es trastorno de pánico y ansiedad. Vive triste, quiere que se termine todo, pero no sabe cómo hacer que su papá cambie. Acá se rompe en llanto”, destacó la influencer en su video.
EL ENFRENTAMIENTO
El pasado viernes, el pequeño le dijo a su mamá que no se quería ir. La asistente social, que es claramente un títere de este señor juez nunca deja constancia de su incomodidad y le dijo “Si no te vas tu mami va a tener problemas, se va a ir presa o venimos con la policía”.
Mi mamá le dijo “mi hijo no va a ir” y ella le amenazó “Absténgase a las consecuencias”. Nara relató que a los 30 minutos llegó una comitiva policial con una orden de allanamiento y la inspectora Nilda Ruiz pidió hablar con el niño, ante la negación de este a irse con su papá, la oficial le dijo al señor juez “su hijo no quiere irse y yo tengo que velar por él”.
Él no podía aceptar que una oficial se le estaba plantando, una persona íntegra. “La justicia nunca estuvo de nuestro lado, lo único que hizo fue humillar a mi mamá y ya fue suficiente, dos mujeres solas contra todo un sistema corrupto y un niño que está sufriendo”, concluyó Nara.
