Así como el 2021 fue raro y desgastante, también contó con momentos hermosos y esperanzadores.
El 2021 fue un año donde el personal de blanco dio su vida por nosotros, salieron a la gran batalla dándolo todo, sin descanso pelearon por cada vida y lloraron cada una que se iba.
Un año donde un chico y su madre montaron un esquema solidario que debería ser imitado por todo Gobierno. Salieron a dar ese ánimo que todo familiar de un enfermo necesitaba, les dieron de comer, buscaron carpas, abrigos, medicamentos, hasta internet…
Un año donde un Intendente nos demostró que con voluntad, buena administración y sin corrupción, se puede hacer todo. Como la construcción de pabellones de contingencia para los pacientes de Covid, instalación de una planta de oxígeno, una farmacia comunitaria, todo en Pandemia.
Un año donde nos dimos cuenta que lo más importante está en lo cotidiano, en ese saludo, ese abrazo, ese cuidate. Porque mañana puede ser tarde y la dicha está en ese momento vivido, en la familia, la que pudimos conservar y abrazar cuando todo caía.
Un año donde un certamen de belleza nos unió, mostró al Mundo un país pequeño y con una de las mujeres más lindas del Universo.
Fue un año fugaz, con dolor y aprendizaje.
Un año que termina para darle espacio a otro, quizás más benévolo y con fuerza para sacar al país adelante, para un cambio, ese empuje necesario para salir a decir ESTE ES MI PAÍS, DEJEN DE ROBARLO.
Y así, con la esperanza puesta en un año mejor, brindo por vos que la luchaste y la seguís luchando, por vos que perdiste un ser querido, por vos que perdiste tu trabajo, por vos que sentís que no podés más, por vos que me abriste tu corazón y me elegiste para leer todos los lunes.
POR VOS, BRINDO POR VOS AMIGO ¡FELIZ 2022!