En el marco del operativo para la apertura de las playas en Encarnación en la temporada 2020-2021, la preocupación de las autoridades sanitarias sigue latente. Si bien se prevé un protocolo para proteger la vida de los visitantes, la duda gira igualmente en torno a qué tanto cumplimiento le darán los turistas que lleguen a la zona.
Hasta el pasado 5 de noviembre, en el Departamento de Itapúa se han registrado 1.648 casos de Covid-19, siendo el quinto más afectado, y un nuevo brote podría poner fin a todo lo logrado por la ciudadanía hasta ahora.
El director de Desarrollo de Servicios y Redes de Salud, Hernán Martínez, manifestó su incertidumbre por la apertura y dijo a este medio que la prioridad principal es cuidar la salud pública. “Haciendo un paralelismo, fue una preocupación tremenda el tema de Caacupé, lo sigue siendo, por más que los obispos, con una sabiduría que aplaudo, hayan salido a decir que la celebración a la Virgen va a ser en forma virtual, la gente se sigue yendo”.
Agregó que las autoridades sanitarias pueden hacer los protocolos y escribirlos, pues el papel lo soporta todo, pero lo que le da miedo es cómo poder controlar que se lleve a cabo, cómo hacer para el control nocturno principalmente.
“¿Cómo podríamos llevar a la práctica un estricto protocolo y evitar las aglomeraciones?. En el simulacro se pusieron unos toldos y se busca que cada núcleo familiar no salga de ese lugar, pero el tema es cómo hacer para que no haya una interacción entre los núcleos”, afirmó el doctor.
Confirmó que estuvo reunido con los viceministros de Salud, los especialistas de la Región Sanitaria, los encargados del Instituto de Previsión Social (IPS) para entre todos hacer un diseño valorando que esto no sea un desborde y haya que lamentar un pico.
“Estamos en una situación favorable, la cuestión es que se respeten las disposiciones. Vamos a hacer distanciamiento de acuerdo con estos toldos, tendremos gente en el agua que vaya delimitando los lugares, porque de qué nos sirve que no nos juntemos en la arena, si en el agua sí lo hacemos, cómo se ve esta prueba pareciera factible, pero hay que llevarlo a la práctica”, resaltó.
Expresó que la intención de las autoridades sanitarias no es la de “ser aguafiestas”, entienden que la ciudadanía está cansada del encierro, pero no hay que olvidar la pandemia que sigue y el país se encuentra en el ojo de la tormenta.
“Vamos a trabajar incansablemente para sacar un buen protocolo y llegar todos juntos a las fiesta, ese es el mensaje que quiero dejar instalado, de repente hay muchas cosas que podemos sacrificar, lo que no podemos sacrificar es la vida”, concluyó el doctor Martínez.
LAS PRIMERAS PRUEBAS
A pesar de esta preocupación, ya arrancaron las primeras pruebas para establecer un sistema de parcelamiento en playas a través de las burbujas sociales. Este mecanismo busca ser una medida para brindar protección a quienes decidan aprovechar sus vacaciones en la ciudad, respetando en todo momento el distanciamiento físico.
La Municipalidad de Encarnación anunció que prevé 100 personas para el trabajo en las playas. “Esperamos contar con el apoyo de la Armada y del Ministerio del Interior que una vez más dieron el compromiso para que todo sea perfecto en condiciones para una temporada verdaderamente exitosa”, apuntó el Intendente Luis Yd.
Todo esto debe ir acompañado de un protocolo sanitario que vele por el registro de los visitantes en las playas, el uso obligatorio de tapabocas, entre otros aspectos de seguridad sanitaria.
Rebecca Arramendi, directora de Turismo de la Municipalidad, mencionó que “agradecemos el empeño desempeñado por cada uno de los componentes de este gran equipo, a los que mantienen nuestras playas en condiciones y están dando todo de sí una vez más para resguardar la seguridad de todos y todas. Esperamos que haya voluntad para que el protocolo sea aprobado por el Ministerio de Salud como además esperamos el cumplimento por parte de las personas”.