Las imágenes desgarradoras que circulan en las redes sociales de perros que supuestamente estaban bajo el amparo de la Dirección, y hoy se encuentran en pésimas condiciones hicieron levantar a todos los amantes de los peludos.
Edith Ortíz, presidenta de Pako Rescate Paraguay, aseguró que la actual directora nunca quiso tener una mesa de trabajo, ni marcar pautas de trabajo en equipo. Contó que las personas se empezaron a preocupar cuando vieron que en las instalaciones de la clínica veterinaria de la Dirección Nacional de Defensa, Salud y Bienestar Animal había un camión de mudanza todo cerrado y bloqueado por una patrullera.
“La propietaria del inmueble llamó a la policía porque se le debía 7 meses de alquiler y la directora actual de Defensa Animal, Teresita Álvarez, pone de excusa el problema administrativo con la gestión del anterior titular, Juan Manuel Enciso, pero él ya había denunciado a su administrador y le destituyó del cargo por anomalías”.
Ortiz continuó diciendo que la actual dirección lleva tres meses y cualquier administración tiene cambios que debe subsanar, pero que la vida de una institución pública tiene que continuar. “No podés quedarte a lamentar y culpar al anterior”.
La protectora de animales comentó que la desnutrición que tenían los animales en esa clínica era severa, puso el ejemplo de Toreto, un perro que fue entregado el 10 de febrero por personas de escasos recursos para una evaluación neurológica. Cuando ingresó era un perro robusto con buen porte, solo colocaba la cabeza contra la pared, necesitaba atención médica, hoy este animal no se puede ni poner de pie.
“La institución que está requisando, imputando a los maltratadores, son los principales maltratadores de animales. Estos animales estaban mejor en sus casas. Otro caso fue el de 3 perritos que sacaban sus cabezas a través del vidrio roto para respirar, estaban encerrados en una pieza 2×2 sin corriente de aire, si eso no es maltrato y crueldad, ¿qué es?”, dijo Ortiz.
Mencionó que junto a sus 4 compañeras se sentaron en la vereda frente al portón, donde esperaron a que llegue el Ministerio Público para incautar estos animales y la policía les cerró el portón a empujones para que no siguieran transmitiendo a través de sus redes.
“Llegaron 2 patrulleras llenas de policías, unos 20 hombres empezaron a arrastrarnos, nos agarraron por el pelo, el objetivo era reprimirnos a nosotras para que ellos pudieran retirar a los animales. Tanta fue su desesperación que empezaron a llamar a taxis violando otra vez el traslado adecuado de los animales, en todo momento violaron su propia ley”.
Acotó que a la fiscala a cargo le dijeron que los animales estaban en un nuevo inmueble en la Avenida Pacheco, pero las personas comunes y las organizaciones legales de protección animal no tienen acceso, por orden de la actual directora, Teresita.
Aseguró que hay una falta de gestión, empatía y nula capacidad de relacionamiento público de la actual directora. Explicó que Enciso ya fue, quedó demostrado que en su época hubo una mala gestión de su administrador, está documentado es de público conocimiento, pero en esa época no hubo maltrato.
“La actual gestión no tiene ni amor ni respeto a los animales. Había falta de higiene, sin aireación y jaulas donde no podían ponerse de pie porque el tamaño no era adecuado. ¿Con qué cara saldrá la Dirección a imputar a maltratadores? Pedimos al señor presidente el saneamiento de esta Dirección”, concluyó la animalera.
DESDE LA FISCALÍA
La fiscala Sonia Mora está encargada de darle seguimiento a la denuncia por supuesto maltrato animal a la administración actual de Defensa Animal. Comentó que fueron a verificar y la misma directora les dijo que el lugar no era el más adecuado y por eso se iban a otro habilitado por Senacsa.
Agregó que en el nuevo lugar todo estaba bien. “Vamos a seguir con la investigación, en realidad todos los animalitos tenían algún problema, son 40 perritos, 22 gatos y 1 gallina, voy a pedir informes, tomar declaraciones, quizás más adelante tengamos un panorama más claro”, acotó la fiscala.
El principal objetivo de la investigación es verificar si los problemas que presentan los animales son del rescate o luego del rescate, conforme a la denuncia realizada.
LA ADMINISTRACIÓN ANTERIOR
El ex director de Defensa y Bienestar Animal, Juan Manuel Enciso, fue muy criticado por la baja ejecución presupuestaria en beneficio de animales, no así para el pago de salarios y gastos administrativos.
Con respecto a eso, Enciso afirmó que en una institución como esta hay requisitos mínimos de la función pública donde tiene que haber un director de recursos humanos, otro de administración y finanzas básico, un director jurídico básico, un director de salud animal que tiene que ser veterinario y uno de rescate.
“Cada dirección tiene un salario puesto por Hacienda porque es pública, el problema es que es muy chico el presupuesto y se va en salario, apenas da para eso y sobraba poco para la parte misional, no obstante pagaba de mi bolsillo para poder cubrir la gran demanda de denuncias porque lastimosamente hay mucho maltrato y el presupuesto muy chico”, aseguró.
Su administrador era un funcionario comisionado de la Secretaría Técnica de Planificación (STP) y falló en sus funciones. Tenía la orden de pagar el alquiler de esta clínica del problema detallado en esta nota, eran unos G.5.5 millones mensuales que suman una deuda de G. 33 millones.
El administrador hizo todos los trámites y no avisó a Enciso para colocar la última firma, lo cual es una excusa que está poniendo la actual directora y que tiene un presupuesto de pago de alquileres y no lo hace, mientras que la institución y los animales están en juego.
“Yo comuniqué la gestión de este administrador a la función pública para ver si amerita un sumario. No ha salido la resolución, no cerró el 2020 y yo ya tenía un nuevo administrador y no podía hacer nada sin ese cierre, me hizo pasar muy mal”, señaló Enciso.
Lo peor del caso, según el ex director, es que el funcionario fue comisionado de nuevo en la Dirección, teniendo ese antecedente.
Subrayó que no se pagó al proveedor de balanceado y la deuda asciende a G. 98 millones, y si se tiene una línea presupuestaria actualmente para pagar eso.
“El daño a la institución es incalculable, quién del sector privado va a querer alquilar o proveer si no se paga en tiempo y forma, ellos tienen que recibir la institución con lo malo y solucionar eso. Yo arranque de 0, de mi bolsillo pagué servicios veterinarios, la actual directora Teresita recibió un laboratorio armado y no sé por qué no lo utiliza, una oficina armada para los funcionarios, vehículos que yo gestioné durante mucho tiempo”.
Finalmente, en cuanto a las condiciones actuales de los animales en la clínica, destacó que durante su gestión no estaba así y tiene testigos porque las puertas estaban abiertas.
Cabe destacar que este medio se intentó comunicar con la actual directora de Defensa Animal, pero no tuvimos retorno.