Los EE.UU. celebra hoy 246 años de independencia, marcando a lo largo de su historia un posicionamiento mundial, aparte de una referencia sociopolítica, económica y judicial, pues incluso hoy no deja de mantener su lucha contra la corrupción y la narcopolítica.
El 4 de julio de 1776, el Congreso de Estados Unidos aprobó la Declaración de Independencia. Su autor principal, Thomas Jefferson, la escribió para anunciar que las trece Colonias Americanas ya no eran parte del Imperio Británico y desde ese momento se marcó la historia de su posicionamiento mundial.
“Estados Unidos ha sido una referencia como tierra prometida donde podía realizarse el sueño americano, con libertad económica, religiosa, pluralismo cultural y un modelo político que privilegiaba las relaciones políticas horizontales. Muy distinto de las monarquías, entonces en vigencia en Europa, con sus diferentes niveles de autoritarismo”, contó el historiador Carlos Gómez Florentin.
Agregó que esto le dio un dinamismo sin paralelo a una nación que se convirtió en una potencia económica, un modelo de modernidad y un destino permanente de migrantes de todo el mundo atraídos por su oferta y corridos de sus países de origen por las condiciones que tenían en sus hogares nacionales.
Con respecto al significado de la independencia de los EE.UU., Gómez Florentin observó que sigue siendo un símbolo de las posibilidades de construir una sociedad moderna que respete las diferentes identidades que hacen parte de la misma. Sin embargo, sentenció que hoy el país norteamericano se encuentra con diferencias fundamentales internas sobre cuestiones tan elementales como el cambio climático, el aborto, la libertad religiosa y las libertades económicas.
“Justamente aquellas libertades que le dieron entidad como una sociedad en la cual gracias a las mezclas sucesivas se mantuvo una sociedad plural tolerante e integradora, hoy pareciera experimentar muchas de las fisuras sociales que ciertamente también tienen una dimensión económica, que caracterizaron a los países europeos a lo largo de la historia”, apuntó el analista.
Con respecto a lo que actualmente representa la independencia, la catalogó como un avanzado modelo de convivencia política, admirado por los líderes de la región que la tuvieron como referencia para construir los gobiernos poscoloniales
“De hecho fue un adelantado en la región y en 1776 puso en marcha lo que luego a partir de la revolución haitiana de 1791 se convertiría en la era de las revoluciones en América. Particularmente entre 1810 y 1835 aproximadamente en América Latina”, finalizó.
Actuaciones determinantes de EE.UU.
La Embajada recientemente reconoció el compromiso paraguayo con la transparencia y anticorrupción, así como los desafíos para fortalecer las instituciones democráticas y el estado de derecho. Así, en su aniversario no deja de mandar un claro posicionamiento contra la corrupción y el narcotráfico.
No obstante, no se puede dejar de observar el protagonismo que tuvo EE.UU. en situaciones determinantes como la de A ultranza Py, uno de los mayores operativos en el país contra el crimen organizado y el lavado de dinero, que contó el acompañamiento especial de la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés).
La nación norteamericana también demostró su compromiso con investigaciones sobre personajes de nuestro país, al haber encarado un estudio sobre la red de blanqueo de dinero, encarcelando a Cynthia Tarragó y a su esposo en 2019. Así también, se encuentra el mensaje determinante que dejaron cuando un funcionario de la Embajada del país se hizo presente en el juicio contra el exsenador Óscar González Daher.
El hecho denota el interés de EE.UU en los casos emblemáticos de corrupción en nuestro país, pues Óscar González Daher, el exfiscal general Javier Díaz Verón y el diputado colorado Ulises Quintana fueron declarados como personas significativamente corruptas y el nuevo embajador del país norteamericano en Paraguay, Marc Ostfield, dejó entrever que la lista se seguirá alargando.