Nyck de Vries, neerlandés de 25 años, es una de las grandes estrellas de la Fórmula E pese a ser novato esta temporada. El piloto de Mercedes es el vigente campeón de la Fórmula 2 y decidió no elegir opciones que le acercaran a la F1 sino pensar en qué sería mejor para su futuro. Así se lo explica a AS: «Vine a la Fórmula E porque era la mejor oportunidad que tenía y entendí que la mejor manera de avanzar en mi carrera. Por el momento estoy muy contento de estar aquí, la Fórmula E es un gran campeonato, muy estable y con un gran futuro».
Lleva cuatro carreras, con un tercero en clasifi cación y un quinto en carrera como mejores resultados, pero el menudo piloto de los Países Bajos está complacido con su actuación: «Estoy bastante satisfecho de cómo están saliendo las cosas hasta ahora. Hemos tenido buenos resultados, hemos cometido errores, penalizaciones… pero creo que en general está siendo un debut muy positivo. Por supuesto, todavía queda mucho por mejorar y aprender aunque como digo estoy feliz de la experiencia hasta ahora. Soy un novato en el campeonato y sigo aprendiendo como en la gestión de la carrera que es, sin duda, una de las áreas en las que más puedo mejorar”.
Reconoce tras su abandono en México que «la Fórmula E es emocionante, pero también puede ser frustrante».
Talento innato al volante que aun así no hace que De Vries pueda llegar al certamen eléctrico de la FIA y ganar desde el principio. ¿La razón? Hay muchas diferencias entre la Fórmula E y otros certámenes de monoplazas. «Acostumbrarme a la conducción de este coche fue extremadamente difícil. Las diferencias entre un F2 y un Fórmula E son enormes: el motor, la carga aerodinámica, los neumáticos, las pistas. Todo es muy diferente, desde que es un coche eléctrico o el concepto de la carrera hasta los circuitos que salvo aquí en México son urbanos. Hay que ir rápido, pero pensando, con una estrategia determinada, gestionando los neumáticos y atentos al consumo de la batería. Además, todo lo que lo rodea y el formato del ePrix es distinto. Tenemos mucha interactividad con los aficionados y todo sucede en un único día», concluye Nyck.
