Punta del Este es el destino donde el lujo y la naturaleza convergen. Es reconocido internacionalmente como uno de los principales balnearios de Latinoamérica y el más exclusivo de la región, se ubica en el departamento de Maldonado de Uruguay y busca mantener buena cara ante la crisis argentina que diezmó la llegada de turistas de ese país. Sin embargo se observaron más paraguayos en este paraíso.
Cada año Punta del Este acoge a miles de compatriotas, para ser exactos, durante el segundo trimestre del año pasado, un total de 7.433 personas fueron desde el país, y gastaron en promedio unos US$ 142 por día, según datos de la embajada de Uruguay en Paraguay.
Sin embargo el verano pasado, la recesión económica y la devaluación del 100% del peso argentino se tradujo en casi 400.000 turistas menos, principalmente argentinos respecto de la temporada anterior. Esta vez se observó una mejora, pero no fue suficiente.
Buscan cómo conquistar al dañado turista argentino, que representa al 60% de los visitantes. Es que aunque el brasileño, el paraguayo, el chileno y otros extranjeros también llegan, el porteño es irremplazable.
El periodista y comunicador uruguayo Marcelo Soba, contó la situación actual de lo que se vive en Punta del Este, el bajón económico y lo que depara con el nuevo cambio de Gobierno.
TURISMO Y BAJÓN ECONÓMICO
“Desde el 28 de diciembre hasta el 6 de enero no se notó el bajón que podemos ver hoy, esa es una fecha en la que Punta del Este se va a saturar siempre entre la cantidad de propietarios que vienen, la gente que aspira a pasar esas fechas acá. Muchos argentinos vinieron igual, pero sí se notó mucho la caída actual. Nosotros estamos acostumbrados a que después del 6 de enero, sobre todo cuando se van los brasileños que son los que hacen más ruido, haya una pequeña caída, pero este año fue un cambio muy drástico, los niveles de gente que se pueden ver hoy son similares a los que se veían recién en febrero”, explicó Soba.
Al dar una vuelta por esta ciudad veraniega se observan muchos locales cerrados en comparación a temporadas pasadas. “Hace 8 años el primer fin de semana de enero tenían que cerrar el puente por la cantidad de gente que había, hoy en día eso no sucede. En La Barra hay muchos locales por la principal que están cerrados y eso se debe a dos cosas, la primera es que La Barra (arteria principal de la ciudad) fue sufriendo una inflación en el valor de los alquileres de los locales, sobre todo en los gastronómicos, año a año fueron aumentando, para dar un ejemplo de 20 m2 no apto para gastronomía, que son los más caros que te podía costar US$ 20 mil la temporada”, según comentó.
Si bien es cierto que la temporada del verano en Punta se fue acortando un poco más, actualmente es considerada desde el 15 de diciembre hasta el 15 de marzo. “Ahora lo que se está haciendo es que los propietarios te alquilan anualmente por US$ 20 mil”
En comparación al año pasado, los precios en Punta del Este se mantuvieron y otros bajaron un poco. De todas maneras sigue siendo caro y sobre todo este año para los argentinos. “Estamos hablando de más del doble que ellos pueden pagar en la costa argentina. La comida te puede costar el doble, entre el cambio de moneda y el aumento del precio que hay acá les queda muy caro a ellos”, explicó.
«Los argentinos que hay hoy en Uruguay son propietarios o gente que tiene mucha plata, pero toda esa clase media argentina que Punta siempre recibió, que cruzaban en el Buquebus o que venían en auto desde Buenos Aires son los que ya no vinieron”
Si bien cada año se observan más paraguayos y brasileños, la ciudad depende de la venida de turistas argentinos más que la región. “Al argentino le gusta venir acá, es un balneario que lo sienten propio y a nosotros nos gusta eso porque es el mejor turista que podemos tener”, sentenció el comunicador.
TEMPORADA DE CAMBIOS
Dejando de lado el turismo uruguayo, conversamos con Marcelo sobre los cambios que le deparan a Uruguay con la transición del Gobierno.
“Uruguay tiene una particularidad que yo la catalogo como una virtud y es que está muy fuerte institucionalmente, con esto me refiero a que si bien seas una persona muy radical de un eje tanto de izquierda como de derecha pueden no coincidir con esto, un Gobierno como el que va a asumir que es de derecha de amplias comillas porque es un abanico bastante grande no va a tener cambios muy significativos. Sí vamos a notar ciertas cosas porque de hecho cambia la dirección pero tampoco se espera que hayan cambios muy radicales en cosas importantes de la política uruguaya, porque Uruguay tiene bases sólidas en lo institucional, en la política monetaria, en la política comercial”, sostuvo Soba.
En cuanto a los cambios que se podrían observar serían los que afectan al día a día del uruguayo, el pronunciamiento con Venezuela y Bolivia, la relación con el Mercosur que puede ser la política de Bolsonaro a la política de Alberto Fernández.
“Pero tampoco es que va a cambiar mucho, tiende a ser muy moderado en estos aspectos, tampoco es que va a cambiar mucho, el Frente amplio tampoco fue una política de ultraizquierda, abrió muchos mercados es como que acá tienden mucho al centro, lo que sí pasó esta vez es que se polarizó un poco más de la cuenta”, sostuvo Soba.
El comunicador destacó que Uruguay es un país muy democrático e indicó que el Frente amplio tenía una afinidad con los sindicatos a la que puede tener el nuevo gobierno, quizás este Gobierno tenga más afinidad con los empresarios, pero tampoco va a ser muy radical, ni para un lado ni para el otro”.
“Uruguay tiene una particularidad que yo la catalogo como una virtud y es que está muy fuerte institucionalmente»
MARCELO SOBA
PERIODISTA