El domingo cobró fuerza una posible intención del oficialismo colorado de destituir a Sandra Quiñónez, fiscal general del Estado.
Ante la consulta de la prensa, Hugo Velázquez, vicepresidente de la República, afirmó que esta semana hablará con los diputados afines a Abdo. Sin embargo, aún se desconoce si la bancada apoyará o no un nuevo intento de destitución de Quiñónez.
Salyn Buzarquis, senador liberal, afirmó que, si el Gobierno quiere, existen los votos. Atendiendo la experiencia que dejó el rechazo del juicio político a Arnaldo Giuzzio.
“Los resultados de la sesión pasada te demuestran que hay votos. En el Senado estoy convencido que podemos llegar a tener una mayoría. Si Añeteté se decide existen votos”, expresó.
El legislador afirmó que está dado el ambiente para la destitución de la fiscal general. Acto seguido recordó los principales cuestionamientos de la gestión de Quiñónez en sus cuatro años al frente de la Fiscalía.
“Tengo dos cuestiones puntuales. Primero la gran estafa del Metrobus que nunca se investigó, nunca prosperó ni imputo a nadie. Se nota un proteccionismo a Ramón Jiménez Gaona, y, por otro lado, nunca avanzan las denuncias internacionales que pesan contra Cartes”, cuestionó.
Finalmente dijo que el país necesita una Fiscalía fuerte y decidida para enfrentar al crimen organizado y terminar con el narco estado.
“Se sabe que hay lavado de dinero, narcotráfico, rollo tráfico, tráfico de armas y más. Si no hay una presión internacional fuerte de afuera no vamos a poder contra el crimen organizado. Rebasaron las fuerzas policiales, militares, fiscalía, jueces y más”, culminó.
APURIL
Gilberto Apuril, senador nacional por Hagamos, expresó por su parte que aún no se acercó nada concreto y oficial presentado a la Comisión Permanente.
“Hay una preocupación desde hace tiempo. Por ende, esta nueva inacción por el caso Cartes solo viene a confirmar lo que ya presentíamos. Veremos qué acciones se toman a partir de ahora en el Ministerio Público”, afirmó.
En otro momento, no quiso aventurarse a dar una posición sobre las acusaciones a Quiñónez. Esto, debido a que aún no fue presentado el libelo acusatorio.
“Analizaremos primero lo que dice, y si estamos de acuerdo apoyaremos la destitución, pero si emitimos ahora la opinión, sería demasiado irresponsable”, culminó.