A finales de agosto, el Ministerio Público denunció que alrededor de 400 cheques, utilizados como pruebas, en el caso Ramón González Daher, fueron robados del Poder Judicial. Los papeles formaban parte del caso de usura, lavado de dinero y denuncia falsa donde se vinculaba al exdirigente deportivo.
A esta situación, se sumó una nueva denuncia en contra de Daher. A mediados de diciembre, el empresario Alberto Antebi afirmó que el acusado utilizaba cheques de garantía para seguir extorsionándolo. Estos papeles formaban parte del lote que cheques robados del ente judicial.
Por ende, el pasado 22 de diciembre, el Ministerio Público allanó la vivienda del exdirigente deportivo. Tras el operativo, Natalia Cacavelos, fiscala del caso solicitó la imputación de Daher por los hechos punibles de quebrantamiento del depósito, en calidad de instigador y extorsión, en calidad de autor.
El lunes, Gustavo Amarilla, juez del caso, admitió la imputación y fijó para el jueves 13 de enero la audiencia de imposición de medidas. Aquí, el otrora presidente de la Asociación Paraguaya de Fútbol (APF), puede recibir una nueva orden de prisión preventiva, que deberá cumplirla, probablemente, en el penal de Tacumbú.
En caso de elevarse el caso a un juicio oral y público, y detectarse culpable al acusado, se expone a una pena de hasta cinco años de cárcel. Sin embargo, los podrá cumplir a la par de los 15 que ya recibió por el caso de usura, lavado y denuncia falsa. En otras palabras, no son sumatorios.
ROA
Esther Roa, activista social, celebró la primera condena de 15 años. Pero cuestionó que el tribunal obvio decretar la prisión del condenado, demostrando con ello una debilidad.
“Si bien es cierto, los condenados habían compurgado la pena mínima, el tribunal debía solicitar la prisión preventiva. En todo caso, la defensa podía solicitar la revisión de la medida cautelar en otra estadía procesal”, afirmó.
La abogada explica que la figura del “quebrantamiento del depósito” solo establece una pena de cinco años. Y la figura de la “extorsión”, tiene una expectativa igual de cinco años.
“Otra debilidad que encuentro a Cacavelos es que no decreta la prisión inmediata de González Daher. Le tira al juez penal de garantías la responsabilidad. El juez, como no hay un aprehendido, fija la audiencia para el 13 de enero. Ella podía decretar la detención, pero no lo hizo”, lamentó.
Roa señala que Daher debía estar tras las rejas de hace tiempo. Pero, debido al temor que existe en el ámbito judicial, hacia la clase política corrupta, los representantes de la justicia, no son más severos con él.
“Aparentemente cae, pero el sistema subsiste. Jueces y fiscales tienen miedo. A ladrones de gallinas, rápido se los detiene. Pero a personas como González Daher no lo pueden enviar las tras rejas”, cuestionó.
