Paraguay es el país que menos ha vacunado en Sudamérica, pues según un estudio realizado por Our World in Data, calcula el número de inmunizados por cada 100 personas, y el nuestro da un porcentaje de 0,02%. Es que en el país aún no se han vacunado ni 2000 trabajadores de la salud, con el lote de las primeras 4000 vacunas (doble dosis) Sputnik V que fueron adquiridos del Fondo Ruso de Inversión Directa.
Recién este miércoles se avanzó con la vacunación de más personas gracias a una donación de 20 mil dosis de la vacuna china CoronoVac, elaborada por el laboratorio Sinovac Life Science, y que fueron donadas por Chile.
Mientras esta paupérrima campaña de vacunación contra el Covid-19 se da en marzo del 2021, las revelaciones que saltaron en las últimas horas dan cuenta que el Gobierno ha perdido un enorme tiempo y no ha realizado gestiones eficientes para tener grandes lotes en nuestro país.
Es que el ex embajador del Paraguay ante la República Argentina, Julio César Vera, confirmó este miércoles que ha realizado gestiones desde hace un buen tiempo para que el Estado paraguayo pueda negociar la compra de vacunas como la Sputnik V y la de AstraZeneca/Oxford, sin embargo fue ninguneado.
Ya en agosto del 2020 había informado que un laboratorio argentino iba a producir las vacunas de AstraZeneca en la Argentina, por lo que se puso en contacto para que Paraguay pueda adquirir los biológicos.
Incluso, se había mantenido un contacto con autoridades paraguaya, entre ellos el ex ministro de Salud Pública (MSP), doctor Julio Mazzoleni, donde se acordó que el Gobierno paraguayo solamente debía de enviar una nota al laboratorio informando de cuantas dosis iban a ser requeridas y en base a eso generar una orden de producción.
Pero la tarea del embajador no acabó allí, es que en enero volvió a hacer otros contactos, esta vez con el laboratorio argentino habilitado para la producción de las Sputnik V, y que fue nexo entre el Gobierno argentino y el Fondo Ruso. Pero tampoco tuvo respuesta. Y recordemos que el 29 de diciembre ya Argentina inició su campaña de inmunización contra el SARS-Cov-2.
La desidia de las autoridades llevó a esta situación de no ser capaces de tener una campaña de vacunación contra el Covid-19 muchos meses antes.
NEGLIGENCIA
“Creo que solo fue negligencia culposa, aunque puede ser dolosa si pensamos mal y buscamos otras hipótesis. Dieron vuelta para la compra de las vacunas quién sabe para qué. No recibí respuesta en ninguno de los casos”, dijo el embajador.
Por otra parte, mencionó que no tiene confirmación si los cancilleres, Antonio Rivas primeros y Federico González después (actual director de Itaipú), informaron al Ministerio de Salud sobre los detalles.
“Informé todo vía Cancillería que hablé con representantes del laboratorio para la obtención de las vacunas. Ignoro si la nota fue enviada al Ministerio de Salud sobre la gestión que realicé para la vacuna AstraZeneca, solo tengo vía para informar por Cancillería. Tener los medios y no haber adquirido las vacunas en tiempo y forma es una falta total de sentido común, totalmente irresponsable”, remarcó en contacto con 650 AM.
De hecho, a estos antecedentes hay que añadir que el 7 de enero de este año el mismo Gobierno de Alberto Fernández se involucró para poder colaborar con la llegada de las vacunas rusas al Paraguay.
Pues el embajador argentino en Paraguay, Domingo Peppo y el miembro del Parlasur por Argentina, Alejandro Karlen, se reunieron en la Cancillería con Federico González para gestionar la llegada de las dosis, y el proyecto consistía en tener en el país, en una primera etapa, 2.500.000 de dosis.
Sin embargo, no hubo avances a pesar del involucramiento del mismo gobierno argentino.
A pesar de todo ese escenario, las autoridades nacionales eligieron los caminos más largos y menos eficientes, pues el 16 de febrero recién el ministro Mazzoleni anunció que iban a llegar a apenas unas 4.000 vacunas rusas, y que solo se habían comprado 1 millón.
En tanto que el ex canciller y actual director paraguayo de Itaipú, Federico González, mencionó que se analizaron las propuestas en el Gobierno.
“El año pasado recibimos varias ofertas de laboratorios, intermediarios y gestores, pero en algunos casos se verificaron que los gestores no tenían el grado de seriedad para las negociaciones”, mencionó en contacto con NPY.
OPTARON POR COVAX
Paraguay ingresó en el Mecanismo Covax, liderado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), para la adquisición de vacunas. De hecho, a mediados del 2020 se desembolsó US$ 7 millones como adelanto para reservar 3,3 millones de dosis. El total que Paraguay debe de pagar a Covax es US$ 47 millones.
Sin embargo, el proceso es mucho más lento, teniendo en cuenta que las aprobaciones de los productos de distintos laboratorios son más lentas para que puedan ingresarlos en su portafolio de opciones.
De hecho, el 24 de febrero pasado el Mecanismo Covax entregó su primer lote de vacunas con 600.000 dosis de la vacuna AstraZeneca/Oxford en Ghana, África. Mientras que el MSP anunció que entregarán 304.800 dosis a Paraguay entre marzo a junio, aunque hasta el momento no hay fecha del arribo del primer lote.
DEMANDA
Toda esta situación de crisis sanitaria por la pandemia del Covid-19, la falta de medicamentos e insumos en los hospitales públicos, y la no llegada de las vacunas en Paraguay, llevó al hartazgo ciudadano y desembocó en la renuncia de Julio Mazzoleni como ministro de Salud.
Pero la cuestión con Mazzoleni no termina allí, pues el abogado Diego Tuma ya presentó una denuncia penal ante el Ministerio Público contra el ex ministro de Salud por la mala administración de los fondos que le fueron otorgados por la Ley de Emergencia, que son unos US$ 426 millones.
“Esto tiene que ver con la administración de los fondos, la forma en que se compraron los medicamentos y los escándalos. La denuncia es por lesión de confianza”, explicó Tuma, y añadió que la fiscala de la causa será Carmen Franco.
Por otra parte, en el escrito de justificación menciona que “a casi un año de la declaración de emergencia sanitaria, nos encontramos en una situación deplorable, donde escasean medicamentos al punto que las familias de los enfermos deben costear de su propio peculio la compra de medicamentos”.