Darío Felipe Giménez es la persona que se fue a las manos con el jefe del Gabinete Civil de la Presidencia de la República, Juan Ernesto Villamayor. El caso se volvió viral, y ganó aún más notoriedad cuando en medio del escrache al político colorado se dan unos intercambios de golpes.
El diputado del Partido Hagamos, Carlos Rejala, lo apodó como el “Señor de la zurda de oro”, ya que como dirían en el barrio, llegó a darle un moquete al hombre fuerte del Gobierno, cuestionado por varios hechos de corrupción.
El episodio se dio en la noche del sábado en un restaurante lujoso donde varias parejas compartían una cena por el Día de San Valentín. Varios de los presentes filmaron lo ocurrido y todo se hizo viral.
Pero, ¿Quién es Darío Felipe Giménez? Nos cuenta que es un empresario ganadero que trabaja en la parte genética de la raza Brangus y que ya logró varios premios por la labor que desarrollan en la Agroganadera Pukavy.
HARTAZGO
El empresario explica que el escrache público empezó por una sensación de impotencia hacia la impunidad que tienen los hombres fuertes de la clase política que son cuestionados y resistidos por la ciudadanía.
En el caso de Villamayor, uno de últimos escándalos donde apareció fue en la cuestionada negociación para el pago de la deuda de Petropar a PDVSA al gobierno interino de Juan Guaidó, y la cometas que había para un abogado cercano a un familiar del presidente.
Como también, el hecho de que su bufete haya logrado evitar que la Dirección Nacional de Aduanas cobre una multa de G. 22 mil millones a una importadora de vehículos.
“Cuando alevosamente vemos que nos roban pasan estas cosas, porque el político tiene que buscar el bien común y estos buscan el bien propio. Tenemos que cambiar ya, la gente está cansada y ese es el reflejo de lo que aconteció el día sábado, que de tanta impotencia empezaron los escraches”, comentó Giménez.
En este sentido indicó que Paraguay necesita de un sistema de justicia que realmente funcione, que no trabaje solamente a favor de unos.
“Necesitamos que haya Justicia en el Paraguay para que haya paz. No va haber paz en el Paraguay cuando no haya justicia”, remarcó.
NADA POLÍTICO
El protagonista de la escena del Día de los Enamorados dijo que solo buscan desviar la atención sobre el repudio ciudadano generalizado.
“Ellos quieren tergiversar lo que pasó, esto es un sentir del pueblo que está indignado por la corrupción, porque en este país el que roba nunca paga y hay una impunidad total”, refirió el ganadero.
Darío Felipe Giménez respondió también a los dichos de ciertos grupos de Colorado Añetete y del mismo ministro Villamayor, quienes insinuaron que todo formaba parte de presiones de grupos políticos, supuestamente se refieran a cartismo.
“Acá no hubo ninguna corriente política de por medio, no está el cartismo ni nada. Acá hay un pueblo que está sentido, un pueblo que siente impotencia, y esa es la verdad”, remarcó.
SOBRE EL GOLPE
En medio del escrache se dio un momento de tensión, cuando Villamayor fue rodeado por clientes del restaurante y le pedían que este abandonara el sitio.
“Se levantó contra una mujer, y ahí yo me meto. Le digo que se retire y me juega uno”, comentó Giménez sobre el episodio.
El ganadero logra dar unos pasos hacia atrás, agacharse y esquivar el golpe que Villamayor quería darle en el rostro, a lo que este avanza de nuevo y responde con una zurda que golpea de lleno en la cara del ministro. Luego se da una serie de empujones, son separados, y el político colorado abandona el lugar ante el abucheo de los presentes.
Ya ante los dichos del jefe de Gabinete Civil, que analizaba accionar judicialmente, Giménez le restó un poco de importancia, y dijo: “no creo que haga nada”.