Hoy se cumplen dos años del atentado que arrebató la vida al exfiscal paraguayo, Marcelo Pecci, en Colombia. Las autoridades aún no han identificado a los autores morales. El Fiscal General del Estado indicó que la comunicación con sus pares colombianos fue “escasa”. El embajador de los Estados Unidos se reunió ayer con la viuda de Pecci para reafirmar el apoyo del gobierno norteamericano en el marco de las investigaciones del magnicidio.
En comunicación con la 1080 AM, el Fiscal General del Estado, Emiliano Rolón Fernández, comentó que la comunicación con Colombia fue “escasa” debido que el entonces Fiscal General colombiano, Francisco Barbosa, había tenido un enfrentamiento con el presidente Gustavo Petro.
“Definitivamente no, no tenemos evidencias relevantes. El teléfono de Marcelo Pecci está en Colombia y tampoco tenemos informaciones de las declaraciones de su contenido y según ellos, no lo hicieron”, explicó Rolón Fernández.
Por su parte, Marc Ostfield, Embajador de los Estados Unidos en Paraguay, se reunió en la tarde del último jueves con la viuda de Marcelo Pecci, Claudia Aguilera, junto con el Embajador de Colombia en el país, Juan Manuela Corzo.
El fiscal paraguayo Marcelo Pecci fue asesinado hace dos años en Colombia. En la víspera del trágico aniversario, me reuní con su viuda, la señora Claudia Aguilera, junto con el Embajador de Colombia Juan Manuel Corzo. Reafirmo la disposición y el compromiso del gobierno de los… pic.twitter.com/Rzec7OcxxN
— Marc Ostfield (él/he) (@USAmbPY) May 9, 2024
“Reafirmo la disposición y compromiso del gobierno de los Estados Unidos, con el avance de las investigaciones y con la lucha contra el crimen organizado. El legado de Marcelo Pecci exige priorizar la investigación, hasta que se haga justicia, para que nunca más ocurra algo así”, alegó Ostifeld a través de sus redes sociales.
Familiares del exfiscal Pecci exigen a las autoridades que “hasta el último recurso se destine a averiguar quién ordenó matarlo”. Luego de dos años, los investigadores del caso no han podido llegar al autor moral del crimen.
