La Concertación nació con la idea de una alianza entre Partidos de la oposición con un objetivo mayor a cualquier ego individual, aliarse en busca de una alternancia política, de un nuevo rumbo para el país. Quizás nació así, pero seamos realistas, había fecha de caducidad marcada para antes de las elecciones generales del 2023.
Este acuerdo político de la oposición llamado “Concertación para un Nuevo Paraguay” tenía como fin presentar una chapa presidencial única, y fue así que un total de 12 partidos y 10 movimientos por citar al PLRA, PPQ, PEN, PRF, Frente Guasu-Ñemongeta, fueron inscriptos el 24 de junio del 2021 en el Tribunal Superior de Justicia Electoral. Algunos disgustos con el precandidato y líder del Partido Liberal Efraín Allegre, el repentino problema de salud del senador y referente del Frente Guasu, Fernando Lugo, llevaron poco a poco a una fractura de la unificación, algo celebrado por el Partido Colorado.
Salidas anticipadas como la de Euclides Acevedo nos dieron un aire, una posibilidad que la Concertación termine como lo que fue en el 2010 las elecciones a la Intendencia de Asunción, cuando Boccia decide a último momento descabalgar su candidatura a favor de Carrizosa, pero fuera del tiempo establecido electoralmente, y fue así como su nombre figuró en las boletas obteniendo 4.573 votos con los cuales Carrizosa hubiera ganado la Intendencia, ya que la diferencia entre él y el ganador Arnaldo “tractor amarillo” Samaniego fue de solo 2.447 votos.
¿Será Euclides-Querey el “Boccia” de la Concertación? haciendo perder por pocos votos a la chapa presidencial que resulte de la misma y dando así la victoria al Partido Colorado, que sabemos gane quien gane las internas Coloradas, por mas peleados y acusados que puedan estar ahora, en ese momento se aliarán por un bien mayor: no ir a la llanura.