Si bien, Walter Harms, diputado por la ANR (cartista), se abstuvo de votar a favor del proyecto de despenalizar declaraciones juradas falsas y de hacerlas públicas el martes último, señaló que de igual manera sigue estando a favor del proyecto. Al mismo tiempo cuestionó la labor de la prensa señalando que solo se publicaron “verdades a medias” en su parecer.
El legislador explica que en lo relacionado a la primera parte del proyecto, que trata sobre la despenalización, ello no tiene vínculos con los otros controles que atraviesa cada autoridad pública como el enriquecimiento ilícito y el lavado de dinero, y que esos mecanismos siguen vigentes.
“La declaración jurada con el falseamiento de datos no se puede comparar con la evasión de impuestos o con otros delitos, no son comparables, no son lo mismo. Una cosa es la manifestación de bienes de lo que uno posee y por otra parte existen los otros mecanismos de control de ingresos y egresos a los cuales debemos someternos de manera ineludible”, explicó.
SOCIEDAD MORBOSA
Sobre el segundo aspecto del proyecto que trataba sobre no hacer públicas las DDJJ salvo orden judicial, Harms explicó que vivimos en una sociedad morbosa donde fácilmente se lo acusa a uno sin tener los argumentos suficientes.
“Yo tengo una casa que cuesta G. 5000 millones. Cualquier ciudadano que ve este dato me va a acusar de que me volví rico con la política. Lo que la gente no sabe es que esa casa fue una herencia de mi abuela a mis padres que luego terminó en mi. Y que además mi madre y mi hermano construyeron partes de él. ¿Pero como explico todo eso en un papel?”, cuestionó el legislador.
CÁMARA DE LA “VERGÜENZA”
Con respecto al mote ya característico de llamar a la Cámara de Diputados como el de la “vergüenza”, el legislador respondió que es un sobrenombre semijustificado.
“Acepto al auto denominación pero a veces no la comparto. Acepto la responsabilidad de mis actos pero no la de mis colegas. Que se avergüencen los que obran de mala fe. Yo creo que obro correctamente, por más que algunos piensen lo contrario”, respondió.
CORPORATIVISMO
Finalmente el legislador instó a la ciudadanía a que comprenda que el Congreso es un colegiado conformado por bancadas. Y que estas votan de acuerdo a la postura de la mayoría.
“Hay decisiones corporativas en las que no puedo estar en contra. Solo abstenerme de votar si no estoy de acuerdo pero nunca votar en contra. Son las reglas de juego que uno acepta para legislar”, concluyó.
El pasado jueves, la Corte Suprema de Justicia decidió tras un fallo, que las declaraciones juradas sean de acceso público, dejando sin efecto esa parte del proyecto de ley ratificado por diputados.
Sin embargo esto no afecta la despenalización que sigue vigente y solo podrá ser suprimida en caso de que Mario Abdo Benítez, presidente de la República, vete el documento. Aunque según declaraciones del mismo mandatario, todo apunta a que sí lo hará.
