Desde que se declaró el Día Mundial del SIDA en 1988, el progreso en materia de prevención y tratamiento de la infección por el VIH ha sido sorprendente. Hay medicamentos que ayudan a las personas seropositivas a tener una vida larga, saludable y prevenir la transmisión del virus.
Cada año, el 1 de diciembre, personas de todas partes se unen para apoyar a las personas que viven con el VIH y recordar a las que han fallecido. La fecha fue elegida en memoria del primer caso de SIDA, detectado un día como hoy pero del año 1981. Este año el lema será: Solidaridad mundial, responsabilidad compartida, un llamado a que la sociedad tome conciencia de cómo el virus afecta la vida de las personas, para poner fin a la discriminación y mejorar la calidad de vida.
¿CÓMO SE TRANSMITE EL VIRUS?
Besar, abrazar, dar la mano, jugar, trabajar o estudiar, compartir duchas o piscinas e intercambiar ropa con personas con VIH no transmite la enfermedad. Asimismo, tener relaciones sexuales utilizando preservativo, un estornudo, la picadura de un mosquito, compartir la vajilla, los mismos servicios higiénicos o la depilación con cera, no son transmisores.
Sí, por el contrario, el virus se contagia por medio de relaciones sexuales vaginales, anales u orales entre personas del mismo o diferente sexo sin protección.
El paso del virus en las relaciones sexuales se realiza a través de las lesiones o heridas microscópicas que se producen durante la penetración y otras prácticas sexuales, por donde los fluidos de quien tiene el virus ingresan al cuerpo de la pareja. El 90% de las transmisiones de VIH se producen por vía sexual. En menor medida, el sexo oral también es una práctica de riesgo, por lo que debe practicarse con un campo de látex.
También se puede contagiar por contacto con sangre al compartir jeringas o cualquier otro elemento cortante o punzante. Por otro lado, una persona gestante puede infectar al hijo durante el embarazo, el parto y la lactancia. Es la principal vía de transmisión del VIH en niños. De no recibir el tratamiento y atención médica adecuada, una persona con VIH tiene un 30% de posibilidades de dar a luz a un bebé con VIH. Con tratamiento y atención médica, el riesgo de transmisión al bebé es casi nulo.
Juan Sebastián Cabral, coordinador de Monitoreo y Evaluación de la Fundación Vencer, comentó que el número estimado de personas que viven con VIH en Paraguay asciende a 21.500, un gran porcentaje que ya son diagnosticadas tienen una edad de entre 14 a 24 años, 60% de la infección se da en la población joven.
“Según estas cifras que maneja el Ministerio de Salud Pública, el Programa Nacional de VIH y las demás organizaciones que trabajan en este sentido, nos dan la pauta de que estamos llegando tarde con la información. Los jóvenes no tienen una percepción de riesgo real sobre el VIH y eso implica tener relaciones sexuales sin protección, no realizarse el test de VIH de manera oportuna, llegamos tarde con los diagnósticos”, dijo.
Recordó la famosa frase que dice “a mí no me va a pasar” porque las personas no se perciben como alguien que pueda ser afectado con el virus. Hay una falta de conciencia, sinónimo de falta de educación en estos temas, lo que lleva a hacer énfasis en que los jóvenes y adolescentes necesitan acceder a información oportuna en la educación integral de la sexualidad.
“Paraguay es uno de los pocos países de la región que tiene garantizado hasta el momento tratamiento antirretroviral. Las personas que son diagnosticadas actualmente tienen la posibilidad de acceder gratuitamente al tratamiento, lo que le llevaría a suprimir la carga viral, a estabilizar su situación de salud, sinónimo de una buena calidad de vida. El VIH no tiene cura, pero es perfectamente tratable”, expresó Cabral.
ESTIGMA Y DISCRIMINACIÓN
El coordinador de Monitoreo y Evaluación de la Fundación Vencer hizo énfasis en los altos índices de estigma y discriminación, una situación muy preocupante que no se ve reflejado con el avance médico, pues te tomás una pastilla por día y estás más tranquilo, pero eso no se traduce en el aspecto social.
“Las personas siguen siendo objeto de discriminación en el ámbito laboral, académico, familiar, muchas personas le tienen más miedo al estigma que al virus mismo y el tratamiento. Esa discriminación es una de las principales barreras para que las personas accedan al tratamiento. Un alto porcentaje de personas diagnosticadas tienen miedo de ir a un servicio de salud y que alguien les mire y les cuente a otras personas. Es una suerte de efecto dominó que neutraliza los esfuerzos que podamos hacer desde la cartera de salud como las otras organizaciones”, explicó.
Asimismo, contó que un gran porciento del personal de salud tiene actitudes discriminatorias ante las personas con VIH, según un índice que hizo la Fundación Vencer en el 2017. El mensaje que envió es el de buscar información, buscar ayuda, no discriminar, conocer las vías por las que se pueden contagiar y buscar ayuda en el caso de haber sido detectado con VIH.
EL 2020 PARA VENCER
Este fue un año complicado en materia de llegada, pues la pandemia confinó a todos en los domicilios y no pudieron hacer visitas al interior, pero sí se ajustaron a los nuevos tiempos, propiciaron espacios de encuentros virtuales, de capacitación.
“La pandemia vino a estirar más la brecha de acceso al sistema de salud, se agregó el miedo a contraer el Covid-19. Al inicio de la crisis, por marzo, como no se tenía tanta información, tenían miedo de irse al servicio de salud. El Programa de VIH reportó que cerca del 45% en materia de alcance de testeo, cayó y ni hablar de quienes habían resultado positivos porque tenían miedo de contraer el Covid. A través de la Fundación llegamos a esas personas y propiciamos que se enviaran antiretrovirales para que las personas se resguardaran en sus casas y no cortaran su tratamiento, en casos extremos vimos el traslado seguro a los servicios de salud para que pudieran recibir las atenciones que requerían”, señaló.
Continuó mencionando que fue desafiante, era algo nuevo para ellos y, sin dudas, hubo mucho que querían hacer y no pudieron, pero evaluarán cómo se presenta la pandemia en 2021 para que Vencer siga apoyando como siempre a las personas con VIH del país.
La Fundación está implementando una campaña bajo el nombre “Vencer a los Prejuicios”, desde las personas que no tienen el virus, hacerse el test de VIH, sobre la salud, la sexualidad y el hecho de cuidarse y cuidar a la pareja usando todos los métodos de protección, y a las personas con VIH, vencer los prejuicios en torno a la infección, no es una condena de muerte, es tratable, las expectativas de vida son altas siempre y cuando esa persona se adhiera al tratamiento, asista regularmente al médico y sigan las pautas que le da.
PREVENCIÓN Y PROMOCIÓN
La directora del Programa Nacional de Control de VIH-Sida, Tania Samudio, afirmó que trabajan mucho la prevención y promoción de los servicios, lo que llaman “prevención combinada”, no solamente del uso del condón, sino en el diagnóstico precoz de las ITS, el hecho de realizarse las pruebas de forma anual, el tratamiento oportuno una vez que es detectada la infección y el poder acceder rápidamente al servicio de salud e iniciar el tratamiento antirretroviral.
“Para aplicar lo que es la PREP, estrategia de prevención preexposición, hay una serie de controles que deben hacerse para ser candidatos a utilizar el medicamento, se debe hacer una prueba de diagnóstico, y si es negativo, está habilitado y conlleva una serie de controles de otras ITS, análisis de rutina y un control mensual, este método puede evitar que el VIH se afiance y se propague por todo el cuerpo”, acotó la doctora.
Cuentan con diferentes servicios a nivel país que ofrecen una atención integral a las personas que viven con VIH y con la disponibilidad de medicamentos antirretrovirales en los servicios de la red del Ministerio de Salud.
En este 2020 el Programa se reinventó y llegan a los hogares con un delivery que tiene la medicación para que la persona con la enfermedad no deje de hacer su tratamiento, esto fue muy innovador y oportuno; además, tienen un sistema de información donde ven cómo está el paciente y si necesita consultar le agendan. La estrategia se sigue en Asunción, Central, Ciudad del Este, Encarnación, y Coronel Oviedo.
“Lo más importante es la responsabilidad, el entender que es una enfermedad que se transmite en las relaciones sexuales y hay medios de protección que son los preservativos. También deben hacerse mensualmente las pruebas de VIH disponibles en la cartera sanitaria para diagnosticar y tratar a tiempo. Estamos acá para lo que necesiten”, concluyó la especialista.
